DEC. 19 2021 CRÍTICA «Cerca de tí» Una vela más en la tarta de cumpleaños Mikel INSAUSTI Se han hecho muchas, muchísimas, películas sobre la paternidad desde Chaplin a nuestros días, pero pocas reflejan ese sentimiento con tanta transparencia como “Nowhere Special” (2020). No por casualidad Uberto Pasolini ha querido que el protagonista trabaje como limpiacristales, ya que es a través de esos vidríos libres de manchas como observa perfectamente una realidad que se le escapa, por lo que ha de apurar cada minuto de vida que pueda pasar junto a su pequeño hijo. De esta forma las emociones resultan más intensas, hasta el punto de que cada gesto, cada mirada, adquiere una dimensión testamentaria, a modo de legado que dejar a ese niño. Y lo increíble es que también el crío a sus cuatro años se muestra consciente de la situación, devolviéndole una gran complicidad a través de detalles que suenan a despedida. La escena de la tarta de cumpleaños en la que el futuro huérfano pone una vela más para su progenitor, como quien pide un íntimo deseo, supone un momento único que perdurará para siempre en la memoria cinéfila. En calidad de productor, Uberto Pasolini había demostrado con “The Full Monty” (1997), que el cine social británico podía coquetear con la comedia e incluslo con el musical, sin renunciar a su esencia. Fue con su segundo largometraje como director “Still Life” (2013), estrenado en la versión doblada con el título de “Nunca es demasiado tarde”, cuando encontró otra vía más para el realismo social, pegada a la narrativa costumbrista. Y de ahí tomó el modelo del hombre corriente y anónimo, interpretado en la ficción de forma veraz por un gran actor, en aquella ocasión Eddie Marsan. Aquí tenemos a James Norton, cuya conmovedora actuación resulta clave para dotar de emoción a un guion que podría haber filmado el mismísimo Ken Loach. Su papel de humilde trabajador de Belfast, que no puede dar a su heredero lo que le gustaría, está lleno de verdad.