El gran corazón de Codi Miller-McIntyre no evita la eliminación del Baskonia

Pese a los 23 puntos y 12 asistencias del «Lobo», los gasteiztarras cayeron en el WIZink Center y quedaron apeados de la pelea por el título de la ACB en la Fase Regular. Bilbao Basket jugó dignamente, pero sumó ante el Barça su sexta derrota seguida.

Después de no poder jugar el viernes, Codi Miller-McIntyre jugó ayer 30 minutos, firmando una valoración de 32 con 23 puntos, 12 asistencias, 4 robos y 3 rebotes. Pero no fue suficiente para derrotar a un Real Madrid que tiró de su tremendo arsenal ofensivo, sobre todo una superioridad debajo del aro que el exbaskonista Poirier aprovechó como nadie, muy bien «alimentado» por sus exteriores.

«Este partido ha sido el resumen de nuestra temporada. Es un palo, pero es lo que hay. Hemos perdido algunos partidos que teníamos que ganar. Si hubiéramos salido con la mentalidad de esta noche, seguramente los hubiéramos ganado, pero no ha podido ser. No podemos volver atrás», resumió Dusko Ivanovic.

Los gasteiztarras, remontando 13 puntos de desventaja, 62-49, pese a no poder contar con Markus Howard, lograron llegar al último cuarto con un empate a 76 en el marcador. Pero el Real Madrid no le dio opción a un Saski Baskonia que, al límite de sus fuerzas, se agarró al partido con un 96-94 adverso pero esperanzador.

No obstante cuando sendos triples de Sergi Llull y Dzanan Musa elevaron el 102-94, el minuto y medio restante del final del partido fue un ejercicio de impotencia ante un destino inexorable.

Nada se le puede reprochar a Saski Baskonia sobre lo sucedido esta última jornada, puesto que estuvo muy cerca de colarse en el Top 8, ya que Manresa cayó por 84-80 en la cancha de Lenovo Tenerife. Pero, aunque las valoraciones hay que hacerlas con mayor calma, la temporada en la competición doméstica terminaba con un descalabro inaceptable para un equipo de la calidad y la ambición de Saski Baskonia, que por primera vez desde que existe la Liga ACB -hace 40 años, allá por la temporada 1983/84-, se queda fuera de las eliminatorias por el título doméstico.

Unicaja contra Manresa será el cruce que pudo haber disputado Saski Baskonia, y una semifinal contra el ganador del cruce entre Valencia Basket y UCAM Murcia.

Ello supone que, por primera vez desde la «burbuja» de 2020, no habrá final futbolera. El Real Madrid, segundo clasificado, se las verá con un Gran Canaria de bajón en estas últimas jornadas. El Barça, que tras ganar en Miribilla afianzó su tercera plaza en la Fase Regular, se cruzará con el Lenovo Tenerife de Txus Vidorreta. En la parte baja, Obradoiro consumó su descenso al salvarse Covirán Granada.

DIGNIDAD SIN VICTORIA

A falta de victoria, bien está cerrar la temporada 2023/24 de la Liga ACB dejando una buena imagen. Bilbao Basket compitió cara a cara frente a un Barça que buscaba redimirse de una semana horrorosa.

El cuadro bilbaino no logró ganar, cerrando la campaña con seis derrotas consecutivas, pero al menos daba la imagen de lo que ha sido el cuadro de Jaume Ponsarnau. Es decir, un equipo digno que mientras ha tenido fuerzas ha competido. De ahí su holgada salvación y la sensación de que, a poco que hubiera habido algo más de salud, el resultado hubiera sido aún mejor. Al final, los hombres de negro acabaron la temporada decimoterceros, y con la duda de si habrá Europa el año que viene o en qué competición continental jugará.

El duelo de Miribilla fue competido y ajustado, en el que el germano-brasileño Oscar Da Silva resultó el elemento indescifrable por parte de los hombres de negro, que por otro lado tuvieron el sustento de la buena actuación de Sacha Killeya-Jones y Kullamae.

Un duelo igualado hasta que se torció en el tercer cuar to. A partir de ahí, el duelo fue un quiero y no puedo local, aunque después de verse con un 49-62 adverso reaccionaron hasta colocar el 68-72 definitivo a 37 segundos del final. Pero no hubo tiempo para más.