El cero a la izquierda

Varios equipos de investigadores neurocientíficos están buscando la reacción de grupos de neuronas instaladas en diversos sectores del cerebro humano, entre ellos el lóbulo límbico, para saber qué pasa exactamente cuando aparece el número cero. Un concepto que puede identificarse con el vacío o la nada pero que es fundamental para entender el mundo en el que vivimos. Un cero a la izquierda de cualquier otro número se torna insignificante, lo mismo que multiplicar cualquier número por cero lleva a la desaparición, al ocaso.

No obstante, la acumulación de ceros a la derecha de cualquier número o secuencia desemboca en el aumento de su valor hasta el infinito. Sobre esta idea se deben fundamentar actualmente los estudios en las universidades de Economía, porque la parte ideológica parece estar constreñida únicamente a unos matices porcentuales. Es posible que todos, o muchos, de los problemas universales se podrían resolver haciendo una utilización la misma noción del cero mucho más humanista.

Javier Milei es la expresión del Cero en mayúscula. Su discurso en la ONU y las estadísticas conocidas de sus seis meses de desgobierno en Argentina nos colocan ante un panegírico casi insuperable del descalabro económico, social, moral y el encumbramiento del cero patatero, la expresión más redonda para señalar el aumento de la pobreza que afecta a millones de argentinos y argentinas. Todo con un objetivo, el déficit cero. Otra idea apocalíptica que se acompaña con la espera del milagro final que anuncia que se arreglará la situación por sí sola.