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Contadores individuales frente a sistemas centralizados

Hace diez días, el 30 de setiembre, finalizó el plazo para instalar contadores individuales en los edificios con calefacción centralizada construidos antes de 1998. La medida busca optimizar el consumo y facilitar el ahorro, que puede llegar hasta el 24%

Para medir el consumo energético real es necesario instalar repartidores de costes o contadores individuales. (Jaizki FONTANEDA | FOKU)

Desde agosto de 2020, una directiva europea obliga a los inmuebles con calefacción y refrigeración central comunitaria construidos antes de 1998 a tener instalados sistemas que permitan individualizar los gastos de consumo; sin embargo, su cumplimiento se ha ido retrasando.

Inicialmente, se fijó un calendario atendiendo a la zona climática, que iba desde el 1 de mayo de 2022 al 1 de mayo de 2023. Poco antes de esa fecha límite, sin embargo, solo el 35% había instalado el equipo necesario, por lo que el Gobierno español estableció un periodo de gracia para las comunidades que solicitaron la instalación pero debido a alguna razón técnica o administrativa no pudieron cumplir en plazo con lo establecido. La prórroga expiró con el inicio de octubre.

La medida afecta en el conjunto del Estado a 1,4 millones de viviendas que han tenido que individualizar su calefacción central. No obstante, no todas las viviendas están obligadas a ello y hay excepciones. Así, quedan exentos los edificios en los que no se pueda recuperar la inversión en un máximo de cuatro años o en los que no sea técnicamente viable llevar a cabo las modificaciones necesarias. La normativa establece que las comunidades que incumplan la medida pueden ser sancionadas con una multa de entre 1.000 y 10.000 euros, pero si solicitaron el TUR Vecinal alegando que harían la instalación en breve, también se enfrentan a un recargo del 25% en el consumo realizado desde que se acogieron a la tarifa regulada.

Para medir el consumo energético real es necesario instalar repartidores de costes o contadores individuales. La elección depende del sistema de calefacción central. Si es de columnas, cada radiador está unido tanto al de la planta superior como al de la inferior, de forma que el agua se mueve en vertical. En cambio, si es de anillos, los radiadores de cada vivienda están unidos entre sí, por lo que hay una única entrada y salida por inmueble. Por tanto, en estos últimos el consumo puede individualizarse colocando un contador a la entrada de la instalación de cada inmueble, no así si está dispuesto en columnas, en ese caso, hay que poner un aparato de medición en cada radiador y una unidad que centraliza las lecturas.

DOS MODOS, UN OBJETIVO

Una de las principales ventajas de los contadores individuales es que permiten medir directamente la energía consumida en cada vivienda, por lo que son más precisos y coinciden con la energía consumida, cantidad con la que se calcula el importe de la factura. Por eso, si bien su instalación es algo más cara, es la recomendada si es posible, porque es mejor y más sencilla, sin necesidad de aplicar factores correctores. No ocurre así con los repartidores de costes. Estos dispositivos miden la temperatura del radiador en el que se colocan y la ponen en relación con la temperatura ambiente. Cuando la diferencia es superior 4 ºC entiende que la calefacción está encendida y empieza a contabilizar. Sin embargo, la lectura que generan no es el valor del consumo, sino que hay que aplicarle un coeficiente que depende de varios factores como el modelo de radiador, su tamaño, el material con el que está hecho… lo que complica que la persona usuaria pueda calcular su consumo.

Cabe mencionar que, además de la cantidad de uso que se haga de la calefacción, el consumo de energía dependerá de diversos factores como la potencia, la cantidad de radiadores, su tamaño o la calidad y el tipo de material con el que están fabricados.

Además, junto con los repartidores de costes, es habitual instalar válvulas en los radiadores para regular el paso del agua caliente y controlar la temperatura de la estancia, lo que permite reducir el despilfarro. Del mismo modo, no hay que olvidar que las facturas suelen incluir también unos costes fijos de funcionamiento que las comunidades de propietarios acuerdan cómo distribuir.

El objetivo de la directiva europea es fomentar el rendimiento y el ahorro energético, basándolo en el consumo individual, así como establecer un reparto más justo, ya que cada vivienda hace frente exclusivamente a su consumo en vez de abonar la cantidad proporcional del consumo de la instalación central. De este modo, puede adecuar y optimizar su uso, lo que facilita el ahorro; garantizar un confort adecuado; evitar costes innecesarios y rebajar la huella de carbono del edificio.

Aunque depende del tipo de instalación y el número de radiadores, el Gobiernoa estima que supondrá un ahorro medio de hasta el 24% en el consumo general del edificio.



Epe laburrean errentagarria den inbertsio bat

Berokuntza zentrala duten etxebizitzek egokitzapenak egin behar izan dituzte araudia betetzeko. Hartutako neurrien gastua, ordea, zenbait aldagairen araberakoa da. Batetik, banakako kontsumoa ezagutzeko ezarri dute neurketa sistema, alegia, kontadore indibidualak edo kostu banatzaileak. Kontadoreek 250 euro inguruko salneurria dute, kostu banaketarako gailu bakoitzak, aldiz, 25-45 euro ingurukoa, beraz, bizitoki bakoitzean dagoen erradiadore kopuruak baldintzatuko du zenbateko osoa.

Kasu horretan, banatzaileak erosi beharrean, alokatzeko aukera ere badago, urtean 70-80 bat euroan. Bestetik, zenbaitetan, instalazioa bera ere moldatu behar izan dute bizilagunek. Zehaztapenak zehaztapen, OCU kontsumitzaile elkarteak kalkulatu du 500 euro baino zertxobait azpitik hasi eta 1.000 euroren bueltara hel daitekeen inbertsioa dela.

Neurriaren xede nagusia, energia modu eraginkorragoan baliatzea eta kontsumoa murriztea dira. Kostu banatzaileak dituzten eraikinetan egindako azterketen arabera, %20-%30 arteko energia aurreztea lortzen da, hau da, batez beste etxebizitzako 200-300 euro urtean. Hortaz, egin beharreko inbertsioa lau urteko epean amortizatzen da.

Euskal Herriko Unibertsitateko ENEDI ikerketa taldeak, aldiz, Bilboko 142 etxebizitzako eraikin batetako berogailu eta ur bero kontsumo datuak aztertu zituen eta ondorioztatu zuen berogailuetan kontadore indibidualak erabiltzen zituen berotze sistema zentralaren prezioa nabarmen murriztu zela, ezarri ondoren bi urteetan kontsumoan %15 eta %20 arteko aurreztea lortuz. M.A.