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Hondarribia recibe la inesperada visita de un ejemplar de ballena


El puerto de Hondarribia recibió ayer la visita inesperada de un ejemplar adulto de rorcual aliblanco, una especie de ballena barbuda que puede llegar a los cinco metros y medio de longitud y superar las cinco toneladas de peso. Su paseo por las aguas de la zona fue capturado en un vídeo por Isaías Cruz y reproducido en el canal de Instagram de Verballenas, donde se comenta que esta especie, junto con las yubartas, «son muy costeras y más fáciles de ver desde cabos o puertos».

El responsable de dicho canal, Gorka Ocio, explicó a GARA que su presencia puede deberse a su alimentación, habitualmente peces pequeños, y que coincide ahora con la temporada de la anchoa. «Se alimenta por filtración, captura a los peces y, a través de sus barbas y empujada por la lengua, expulsa el agua sobrante», describe.

El encuentro con dicho cetáceo coincidió con la llegada del buen tiempo, lo que trajo consigo que grupos de jóvenes se acercasen a lo largo de la tarde al puerto hondarribiarra para disfrutar del sol, lo que facilitó asimismo que se pudiese recoger en imágenes dicho momento.

43 ANIMALES VARADOS EN GIPUZKOA Y BIZKAIA

La red Sareus atendió a un total de 43 animales varados en las playas de Gipukoa y Bizkaia durante el año pasado, y ya ha hecho lo propio con otros 17 durante el primer trimestre de 2025, según informó la UPV/EHU.

Desde 1993, los municipios en los que más varamientos se han registrado son Donostia, por encima de 80; Zumaia y Zarautz, con más de 40, y Getxo, Sopela, Bermeo y Getaria, con más de 30.