APR. 03 2025 LAB y ELA insisten en un SMI propio tras reunirse con un Pradales «equidistante» La coordinadora general de LAB, Garbiñe Aranburu, y el secretario general de ELA, Mitxel Lakuntza, se reunieron ayer con el lehendakari Imanol Pradales para pedirle que exija a la patronal que se siente a negociar un salario mínimo propio de 1500 euros. Insistieron en que «hay una equidistancia» que no van a dar por buena. Imagen de la reunión de ayer en Ajuria Enea. (Raul BOGAJO | FOKU) GARA GASTEIZ Tras la negativa de Confebask a acordar el salario mínimo propio mediante un acuerdo interprofesional, la coordinadora general de LAB, Garbiñe Aranburu, y Mitxel Lakuntza, secretario general de ELA, se reunieron ayer con el lehendakari Imanol Pradales para exigirle que «se implique» y exija a la patronal que se siente a negociar. Sin embargo, Lakuntza admitió tras el encuentro que no escucharon aquello que les gustaría por parte del lehendakari, e insistió en que «hay una equidistancia» que no van a dar por buena. En el mismo sentido, Aranburu remarcó que salen «con la idea de tener que seguir insistiendo», a la vez que pidió también más audacia y valentía a Lakua. La reunión, celebrada en el palacio de Ajuria Enea, se celebró a petición de ELA, LAB, ESK, Steilas, Hiru y Etxalde, que suman el 65% de la representación sindical, y sucedió a la mantenida el martes por Pradales con la patronal Confebask, que puso sobre la mesa la guerra comercial de Trump y el absentismo laboral, pero no la subida del salario mínimo tras negarse a debatir y negociar con los sindicatos. Lakua no informó del contenido del encuentro, pero los líderes de ELA y LAB explicaron que plantearon al lehendakari Pradales una propuesta para conseguir un salario mínimo de 1.500 euros, que beneficiaría a 140.000 trabajadores y sobre todo trabajadoras, de sectores como hostelería, telemarketing o residencias. Para Lakuntza, «no se puede vivir en condiciones dignas en Euskadi con los 1.184 euros del salario mínimo español» y las excusas de la patronal para no negociarlo «no tienen consistencia. El verdadero motivo es la estrategia de la patronal para hacer negocio con salarios bajos». En esa misma línea, Aranburu afirmó que «el reparto de la riqueza de este país es cada vez menos equitativo, aumenta la pobreza, aumenta el número de trabajadores y trabajadoras con salarios muy bajos; especialmente mujeres, jóvenes, migrantes o quienes tienen diversidad funcional». Al mismo tiempo, la coordinadora general de LAB dijo que «es Confebask la que marca la orientación de la política fiscal, evitando una fiscalidad más progresiva y que grave más a las rentas del capital y a los beneficios empresariales». Por ello, ambos exigieron al lehendakari «mayor implicación para exigir a Confebask que se siente, y no solo que se siente, sino que acuerde el salario mínimo». Asimismo, le expresaron que no se puede mantener una equidistancia en este tema: «O se está a favor o no, no vale con un mero emplazamiento al diálogo». INICIATIVA LEGISLATIVA POPULAR Los sindicatos anunciaron que van a plantear esta demanda del salario mínimo a través de una iniciativa legislativa popular (ILP), para la que van a recoger firmas, y posteriormente será presentada en el Parlamento de Gasteiz. También pidieron a Pradales que «se moje» y que cuando se presente vote a favor de la misma. De esta manera, advirtieron de que no se van a quedar parados, sino que van a seguir movilizándose y hoy mismo, a las 11.30, se realizará una concentración ante la sede de la patronal, en la Plaza Euskadi de Bilbo. Así, Lakuntza recordó al lehendakari que «hay iniciativas que están en su mano y permitirían superar el portazo de Confebask. Hay una vía política e institucional; para ello, debe apoyar la propuesta de ILP que reclamará al Congreso modificar el Estatuto de los y las Trabajadoras, de modo que el Parlamento Vasco pudiera fijar un SMI propio». REUNIÓNSegún indicaron los sindicatos, el encuentro de ayer supuso «la primera reunión conjunta del lehendakari con las direcciones de ELA y LAB, lo que subraya la importancia que la mayoría sindical otorga a la cuestión del salario mínimo».