SEP. 29 2025 ALDERDI EGUNA 2025 El PNV se ve en el centro, pero midió mal la campa El «nuevo PNV» de Aitor Esteban escenificó en el Alderdi Eguna un viaje al centro que en las formas se mostró con un escenario redondo pero esquinado en Foronda, que dejó al aire demasiadas calvas, y en lo político, a juzgar por lo dicho, se basará en no aceptar un nuevo estatus si no es un salto de autogobierno, y hacer equilibrios sin criticar al PSE. Imagen del acto cenral del Alderdi Eguna, con toda la dirección en el escenario, ofrecida por el propio PNV. (EAJ-PNV) Iñaki IRIONDO {{^data.noClicksRemaining}} To read this article sign up for free or subscribe Already registered or subscribed? Sign in SIGN UP TO READ {{/data.noClicksRemaining}} {{#data.noClicksRemaining}} You have run out of clicks Subscribe {{/data.noClicksRemaining}} El PNV cambió para esta ocasión el formato físico de su Alderdi Eguna, sustituyendo la tribuna donde acogían a unos 350 cargos internos e invitados, y la estructura de escenario frontal, ante la que en años anteriores colocaron 2.700 sillas, por un escenario redondo con un número similar de asientos puestos a su alrededor, pero donde debían situarse también los que antes estaban en la tribuna. Traducción; menos sitio para el público. Esta nueva disposición escénica fue aprovechada por el presidente del EBB, Aitor Esteban, para decir que «no somos equidistantes: somos el centro de gravedad que mantiene a Euskadi en marcha». Afirmó que «estamos también en el centro de la campa, lo cual quiere decir mucho en estos tiempos bipolares de extremos enfrentados, del absolutamente blanco o el absolutamente negro». «Más en el centro no podemos estar», concluyó Una aseveración que no era del todo cierta. En realidad el escenario no estaba «en el centro de la campa», sino en el centro de «media campa». Cualquiera que mire imágenes de celebraciones anteriores podrá comprobar que el PNV aspiró ayer a llenar el espacio que otros años quedaba en la media campa más cercana a la tribuna, y no lo logró. Así que, ¿dónde está de verdad el PNV? Esteban respondió que «Bildu nos dice que estamos en la derechona y el PP dice que somos izquierda. Conclusión: más en el centro no podemos estar». Esta versión del «Cristo entre los dos ladrones», que puso en boga Xabier Arzalluz en tiempos de Juan José Ibarretxe, no se sostiene físicamente. Estaban a un lado de la campa. Y en un escenario redondo, si era derecha, izquierda, adelante o detrás [un, dos, tres] depende del punto de vista del observador. En todo caso, tomas cenitales que en ocasiones ofrecía la propia realización del partido a través de un dron mostraban que la nueva disposición de los asistentes evidenciaba enormes calvas en las campas de Foronda, con una asistencia que apenas superó ayer las cinco mil personas. Cada año mengua la cifra. Cabe recordar que la enorme ikurriña humana que llenó toda la campa en 2009 de punta a punta, estaba compuesta por unas quince mil personas contadas por sus cartulinas. En las imágenes que ofreció el PNV se podían ver entonces 35 txosnas. Ayer solo había 22. Entre los asistentes, se pudo comprobar que el ex presidente del EBB Andoni Ortuzar sigue moviéndose como pez en el agua entre los suyos. Y la organización le sentó en la primera fila del círculo, precisamente junto al anterior lehendakari, Iñigo Urkullu. Hubo una amplia representación de los «partidos amigos» del PNV, entre los que se vio una notable delegación de Junts. Durante todo el acto se hicieron muchas menciones a la terrible situación de Palestina y de Ucrania. Las banderas de ambos países estaban sobreimpresas en las pantallas que retransmitían el acto desde encima del escenario redondo, en el que los oradores tenían que ir cambiando de colocación en el atril para ir mirando a todos la concurrencia sin dar la espalada demasiado a nadie y tampoco perder imagen del teleprompter a leer. MUCHO PALO A EH BILDU Y UNA PUERTA ABIERTA El mensaje político más importante que ofreció Aitor Esteban lo hizo en relación con el nuevo estatus. Después de exponer durante varios párrafos de su discurso las enormes diferencias que el PNV mantiene con EH Bildu, y criticar y menospreciar a esta formación de distintas maneras, se preguntó «si podemos ponernos de acuerdo en algo». Y se respondió a sí mismo que «quizá en un salto estatutario hacia un nuevo estatus político. Vamos a verlo. El PNV no va escatimar esfuerzos en ello a pesar de que, como ya he dicho otras veces, el inestable panorama político español hace complicada la travesía. Pero vamos a intentarlo, como nos dijo también el lehendakari». El presidente del EBB, en todo caso, manifestó que «quiero hablar claro (ya sabéis que no me gusta andar con rodeos): si el nuevo estatus no supone un salto real en reconocimiento nacional, arbitraje y presencia exterior, el PNV no estará. Queremos acuerdos, pero no decorados vacíos. Y pase lo que pase, que no haya ninguna duda: seguiremos transformando Euskadi, reforzando el autogobierno como siempre ha hecho el PNV». CAMBIO DE ESTATUTOS INTERNOS EN DICIEMBRE En el ámbito interno del partido, el nuevo presidente del EBB no hizo ninguna valoración del proceso que desde el pasado Alderdi Eguna ha vivido el PNV hasta su elección con desistimiento mediante de su predecesor Andoni Ortuzar. Solo mencionó las labores de reforma de los estatutos de la formación, en busca de una estructura más ligera y adaptada a los tiempos. Esteban anunció que la comisión que está trabajando en esta reforma presentará pronto su borrador a la dirección nacional, que en noviembre será debatido por las juntas municipales. La Asamblea General para su definitiva aprobación se celebrará el 13 de diciembre en el Palacio Europa de Gasteiz. El presidente del EBB pidió participación de la militancia, «que aportéis vuestras ideas, incluso que seáis disruptivos. Que no os dé miedo proponer cosas que cambien los modelos que hemos seguido hasta ahora. Desde luego -afirmó - este partido va a seguir siendo reconocible en lo esencial, pero tenemos que adaptarnos al siglo XXI, que no es simplemente un cambio de época, es un cambio de paradigma de las formas de hacer política». Aitor Esteban pronunció su discurso principalmente en castellano y euskara, aunque hizo algunas menciones en francés «para dirigirse a la afiliación de Iparralde», según la nota oficial del partido, y en «inglés, para decirle a Europa que Euskadi exige su lugar como nación». Llamó la atención entre algunos periodistas que Esteban se saltara un párrafo que figuraba en el texto repartido a los medios sobre la complejidad de la situación política en el Estado, llena de inestabilidad en la que no está claro si se acabará la legislatura o se anticiparán las elecciones. LEHENDAKARI, TRILEROS Y GALLINERO ESPAÑOL Como es tradición, antes que el presidente del EBB intervino el lehendakari, Imanol Pradales, que llamó a «proteger y defender» la Casa Vasca, contrapuesta «al gallinero español» -figura retórica que también empleó Esteban- y cuidar a las personas, su salud y bienestar emocional». Pradales situó la vivienda como «objetivo central» de la política vasca. Y para ello consideró que se debe «fortalecer el autogobierno vasco a pesar de las trabas que llegan desde Madrid». Puso el ejemplo de que «lograr cada competencia es como sacar una muela», para asegurar que «a pesar de que hay mucho trilero, vamos a pelear por cada una de las competencias que nos pertenecen». El lehendakari habló de la necesidad de contar con nuevas capacidades políticas para gestionar la migración y para poder acoger de manera más adecuada a quien llega a nuestro país en busca de un futuro mejor, y lo hacen en un momento en el que se escuchan discursos «muy peligrosos» que cuestionan el euskara, plantean la supresión del autogobierno, el Concierto Económico o la recentralización de la educación, la seguridad o la sanidad». Advirtió en este sentido de que «no nos desprecien, no nos menosprecien, no lo vamos a permitir. Nos van a tener en frente». Además, haciendo referencia a episodios de este pasado verano, Pradales lanzó un mensaje de apoyo a la Ertzaintza y policías municipales, para quienes pidió un aplauso, que fue ampliamente correspondido por los asistentes. Declaró con vehemencia que «no vamos a permitir que nuestras hijas, amamas o aitites no puedan andar tranquilos por los pueblos de Euskadi». En línea con las últimas iniciativas de su Gobierno, el lehendakari añadió que hay que trabajar para contar con una economía vasca fuerte sostenida por una industria, la ciencia y la tecnología sin olvidar que hay que garantizar la seguridad integral del país a todos los niveles. El lehendakari terminó pidiendo «confianza» a los asistentes, «porque en este país estamos haciendo los deberes». EGI: «SOMOS EL FUTURO DE ESTE PAÍS» La primera en intervenir tras el desfile de agrupaciones y órganos del partido, la izada de la ikurriña y la danza de homenaje fue, como siempre, la representación de EGI. En esta ocasión, la alavesa Iraia Pinedo, defendió que «GKS, Ernai y los movimientos de extrema derecha llenan plazas de discursos vacíos. Pero Euskadi no se construye sobre simples gritos: menos historias y más propuestas. ¡Menos excusas y más compromiso con Euskadi! Las y los jóvenes jeltzales somos el futuro del país». Aunque tras los discursos ya salían filas de coches de Foronda, la mayoría se quedaron a comer y compartir jornada. El escenario no estaba en «el centro de la campa», sino en el centro de «media campa», que el PNV intentó ayer llenar sin conseguirlo tampoco El presidente del EBB, Aitor Esteban, aseguró que «si el nuevo estatus no supone un salto real en reconocimiento nacional, arbitraje y presencia exterior, el PNV no estará».