Una ecuación desigual

En Soto del Real compartí celda con una compañera a la que aprecio mucho. Una noche, como Catedrática de Matemáticas que es, me explicó la importancia de esta disciplina en la vida cotidiana. Decía que si sabemos leer los números entenderemos mejor la realidad. Faltan seis semanas para que acabe el año y también para que se aprueben los Presupuestos, es decir el dinero que financiará el gasto de las políticas que, en 2026, marcarán nuestras humildes vidas. El Ejecutivo de Lakua dispondrá de 16.378 millones de euros, un 4% más que el año anterior. La lectura de cómo se empleará ese dinero puede resultar árida si no se conocen los entresijos institucionales. Sin embargo, hay decisiones que llaman la atención porque conciernen a una vulneración de derechos que está en la calle: la vivienda y la represión policial. Seguridad contará con 849 millones para ampliar los recursos de la Ertzaintza, un 6,4% más que el año pasado, y 367 millones más que los designados a Vivienda (482,2). En el Fórum de Europa, donde departieron las élites económicas y políticas del Estado, Pradales anunció que la CAV cuenta con grandes «incentivos» fiscales para las empresas. Es decir, aquí, pagarán menos. Con estos términos la ecuación siempre dará un resultado injusto y desigual para la clase trabajadora.