La plantilla y el grupo árabe alcanzan un acuerdo para Astilleros Balenciaga

La plantilla y el grupo árabe Abu Dhabi Ports han alcanzado un acuerdo para la venta de Astilleros Balenciaga. El pacto contempla una reducción de los salarios del 5% y su congelación durante tres ejercicios, así como la subrogación de 59 contratos, ya que únicamente se excluyen siete por estar ya en relevo o en edad de jubilación, precisaron ayer fuentes cercanas a la operación.

Los trabajadores celebraron ayer una asamblea en la que aceptaron la contrapropuesta de los inversores, tras semanas de negociaciones que finalmente han permitido un acercamiento que salva in extremis la empresa, el empleo y garantiza carga de trabajo.

El presidente del comité de empresa de Astilleros Balenciaga, David Tejera (CCOO), expresó su satisfacción por el hecho de que se haya logrado mantener la actividad. «Ese era el objetivo y se ha conseguido», remarcó en declaraciones a Efe, en las que también explicó que, en el marco del acuerdo, se han establecido unas retribuciones variables que, según indicó, tendrán que concretarse en una mesa negociadora. Añadió que, una vez aceptada la propuesta por el comité de empresa (CCOO, UGT y LAB), el grupo árabe deberá plasmar también su firma para oficializar el acuerdo.

REQUISITO IMPRESCINDIBLE

Tejera puso de relieve la larga lucha protagonizada por los trabajadores para activar una empresa «importantísima» para la localidad costera. «Ahora nos toca descansar», dijo tras unas negociaciones que en los últimos días han sido frenéticas. El “sí” de la plantilla era un requisito imprescindible para dar luz verde al protocolo de venta del astillero al grupo árabe Abu Dhabi Ports, que fue firmado el pasado 30 de noviembre por importe de 11,2 millones de euros.

El presidente del comité quiso agradecer el apoyo que han recibido por parte de las instituciones que han estado involucradas en salvar el astillero, en concurso de acreedores desde diciembre de 2024.

Ayer, el consejero de Industria del Gobierno de Lakua, Mikel Jauregi, valoró el acuerdo alcanzado en Balenciaga que permite llevar a buen puerto una operación en la que estaba en juego el futuro del astillero y también toda la actividad industrial y el empleo indirecto que este genera.

Jauregi agradeció el esfuerzo de las partes implicadas en las negociaciones en las que, señaló, «la cuerda se ha tensado mucho en las últimas semanas pero nunca se ha roto».

«&wordJoiner;No ha sido un proceso fácil. Nunca lo son. A pesar de las dificultades que nos hemos encontrado en el camino, nunca hemos caído en el derrotismo. Todos entendemos la importancia de trabajar duro con constancia, prudencia y discreción. Y el acuerdo de hoy es fruto de este compromiso por todas las partes implicadas», subrayó, y destacó todo lo que estaba en juego en esta operación: el futuro de Balenciaga y sus trabajadores, y también la actividad industrial que generan los astilleros a su alrededor y todo el empleo indirecto.

SENSACIÓN «AGRIDULCE»

El alcalde de Zumaia, Iñaki Ostolaza, expresó a Efe su satisfacción por el acuerdo, aunque reconoció que tiene una sensación «agridulce», ya que ha habido que «dejar pelos en la gatera» en una negociación que, según indicó, ha sido «dura, larga y complicada».

Esta transacción quedó condicionada a la obtención de la concesión por parte de Lakua, asunto ya resuelto, y al acuerdo del comité de empresa que advirtió, tras la firma, de que sus líneas rojas pasaban por mantener la plantilla y las condiciones laborales.

La diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza, valoró que el acuerdo es una noticia «totalmente positiva» para Zumaia y para todo el territorio por su «importancia en términos económicos y de empleo».

EH Bildu también se felicitó por el acuerdo, que garantiza la continuidad de la compañía. Tras felicitar a los trabajadores de Balenciaga por «la actitud mantenida durante el proceso», la coalición valoró que «siempre es una buena noticia no perder puestos de trabajo». «El proceso ha sido largo, pero finalmente ha llegado a buen puerto», apostilló.

«Nos congratula lo acontecido en este caso, pero es imprescindible tener las miras más allá porque, aparte de la gestión de conflictos puntuales, es imprescindible contar con un plan de industria proactivo para medio y largo plazo», indicaron desde EH Bildu.

En este largo proceso para intentar salvar la compañía, la decisión del ente público Cofides de aceptar en marzo una quita parcial de la deuda del astillero que pasó de 15 a 8,5 millones de euros contribuyó a desbloquear la situación y animó a inversores a presentar sus ofertas, entre las cuales la más favorable ha sido la del consorcio árabe.