En busca de la manera de que la gasolina no se agote

GBC - VALENCIA BASKET

No le sobra gasolina a este Gipuzkoa Basket y esta tarde volverá a padecer esa carestía de combustible. Pese a recuperar a Josep Franch -aunque tendrá que jugar con unas gafas al más puro estilo Tony Parker en Londres 2012-, los de Jaume Ponsarnau no podrán contar con Grimau ni con Motos ante un Valencia Basket que, amén de querer asegurarse una plaza en la Copa, recupera a Van Rossom.

La espalda le está dando muchos quebraderos de cabeza a Jordi Grimau. Aunque el fin de semana pasado jugase en La Laguna, el escolta catalán volvía a resentirse y no podrá llegar al partido de Illunbe. Por su parte, el escolta donostiarra Mikel Motos sufría en el último entrenamiento semanal una mala caída tras un salto, causándole a resultas de ello una fractura en el quinto metatarsiano del pie derecho. El jugador guipuzcoano causará baja aldededor de seis semanas.

«Estamos gestando una frustración por todas las dificultades que tenemos para poder ser el equipo que creemos que podemos ser. Y es que llevamos dos semanas sin poder entrenar cinco contra cinco», se lamentaba Jaume Ponsarnau en la previa. «Pero lo cierto es que tenemos a más de cinco jugadores que tienen todas las ganas e ilusión y tratarán de competir con sus máximas fuerzas. En vez de lamentarnos, lo que tenemos que hacer es encontrar la forma de alargar nuestras energías en el partido», añadía.

Mantenerse en la pista

Gipuzkoa Basket se enfrenta a un rival «cuya intención es sacarte de la pista desde su defensa», advertía Ponsarnau. A través del rebote ofensivo y los robos, el técnico de GBC avisaba del peligro de los de Perasovic.

«Te obligan a jugar más lejos de lo que sueles hacerlo y también nos va a provocar que hagamos un trabajo de mucha calidad para guardar el rebote defensivo», explicaba.