Oportunidad en la dificultad

Con Raúl Albentosa en Inglaterra, Raúl Navas sancionado y Borja Ekiza con problemas físicos -solo ha podido participar en un entrenamiento esta semana-, Txema Añibarro es el único central específico con el que cuenta Gaizka Garitano para el derbi de Anoeta. Un problema, sin duda, aunque el técnico azulgrana asegura no verlo como tal. «Tenemos alternativas, hay futbolistas que están pidiendo jugar a gritos», asegura.

Los problemas son innegables para el observador externo. Atinar con el once que presentará hoy Garitano resulta ciertamente complicado. Ni siquiera es fácil adelantar el dibujo por el que se decantará. Para empezar porque, hasta esta misma mañana, no se desvelará definitivamente la incógnita en torno al estado de Borja Ekiza y tampoco se conocerá la composición de la convocatoria.

Aún estando en condiciones el navarro, su entrenador se encontrará con un jugador que apenas ha podido trabajar esta semana por los problemas cervicales con los que regresó de Córdoba y que tampoco se cuenta entre los más rodados de la plantilla. Qué decir de Txema Añibarro, que ha tenido que esperar hasta la 19ª jornada para disputar sus primeros y, de momento, únicos 45 minutos de Liga. Parece probable que Lillo, el comodín de Garitano en la zaga, se incruste en el centro de la defensa, como ya hecho en otro par de ocasiones. Aunque siempre como tercer central, con lo que la posible ausencia de Ekiza seguiría dejando huérfana a la defensa. En ese caso, el técnico podría optar por recolocar a un hombre más -el recién llegado Borja, Errasti o Didac, que ya actuó ahí durante un tramo del choque copero ante el Getafe- o fortalecer el centro del campo con una suerte de trivote. Borja o Boateng se colocaría así por detrás de Errasti y Dani García.

Las consecuencias, claro, se trasladarían a las líneas ofensivas. Capa y Saúl parecen tener un puesto seguro en las bandas, mientras Arruabarrena, suplente en las dos últimas jornadas, y Manu, competirían por una última plaza.

Muchas incógnitas y otros tantos quebraderos de cabeza, aunque Gaizka Garitano prefiere hablar de «oportunidades». «Estas situaciones nos ofrecen nuevas oportunidades -explica-. Pueden jugar otros futbolistas, cambiar de puesto, puede colocarse un lateral en el centro, retrasarse un jugador del centro del campo... Lo que hemos hecho siempre, no hay problema. Hay muchos futbolistas que están esperando una oportunidad... Estoy viendo a Txema Añibarro saltar como capitán a Anoeta y me estoy emocionando». «Hay futbolistas que están pidiendo a gritos jugar -insistió- y yo estoy deseando meterles, así que no lo veo como un problema, sino como una oportunidad». Además, «si algo ha demostrado siempre este equipo, es que se crece ante las adversidades, así que estoy tranquilo», subrayó.

La Real, favorita

También como un reto. Y no de los fáciles. Porque por mucha ventaja en la clasificación con la que llegue el Eibar a la cita, Garitano ve a la Real superior. La sugerencia de colocar a su equipo la etiqueta de favorito para el choque le provoca una sonrisa inmediata. «La Real es favorita clara -asegura, contundente-. Es superior en todos los aspectos, de juego, de club... Es favorita».

Reconoce, es evidente, que la trayectoria azulgrana ha sido mucho mejor en la primera vuelta pero también recuerda que los donostiarras han «ganado a Real Madrid, Barcelona y Atlético. Pocos equipos pueden hacer eso, la mayoría somos incapaces. Eso te demuestra que es un buen equipo, que tiene mucha calidad y que tiene recursos. Porque sin recursos no podría ganar a equipos como esos». Tampoco cree que el ambiente de tensión que se vive en Anoeta, como se pudo comprobar en el choque frente al Rayo, va a afectar en exceso a su oponente. «Están acostumbrados a las diferentes situaciones, son jugadores experimentados que ya llevan años en Primera», recordó el entrenador vizcaino, que además espera a una Real en su mejor versión. «Conozco bien a sus jugadores, incluso he jugado con algunos de ellos. Son muy buenos jugadores y estarán con muchas ganas de tirar pa arriba. Contamos con que vayan a ofrecer su mejor nivel del año porque se juega mucho y cuando la Real hace las cosas bien, es un rival que te obliga mucho».

Garitano, de todos modos, prefiere concentrar sus esfuerzos en «lo nuestro, que también nos jugamos mucho. Es un partido especial, sin duda, histórico, con algo más que los tres puntos. Pero están los tres puntos y tenemos que pelar por ellos. Y para eso tendremos que ofrecer nuestra mejor versión porque Anoeta siempre es un campo difícil y además seguro que nos encontramos con una buena Real», insistió.