Italia-España, duelo de jugones que va camino de convertirse en tradición en la Eurocopa

Transalpinos e hispanos se miden por un puesto en la final –martes, Wembley, 21.00, Telecinco– de una Eurocopa que ha ido dejando en la cuneta a aquellas selecciones que han sido más cicateras a la hora de generar fútbol sobre el césped.


No ha sido el caso de los de Mancini y Luis Enrique, quienes han desplegado un juego ofensivo, no siempre acompañado de acierto, y que supone un soplo de aire fresco en lo que se refiere al cuadro italiano, abandonado ya su tradicional catenaccio y apostando desde hace tiempo por un estilo que busca la portería contraria.


La cita viene convirtiéndose en un clásico de las recientes Eurocopas, pues se repetirá en las cuatro últimas ediciones, con resultados favorables para España en 2008 y 2012 y victoria azzurra en el más reciente precedente, los octavos de 2016.


Dos viejos conocidos que saben de sus virtudes y debilidades, pero que en este torneo han ido ganando enteros a medida que firmaban números de récord. Italia sumó ante Bélgica su decimoquinta victoria consecutiva en una Eurocopa –contando la fase de clasificación–, un hito hasta ahora nunca logrado. Además del pleno de triunfos en la presente edición del torneo, acumula 33 partidos seguidos sin conocer la derrota.


Más irregular ha sido el trayecto de una España que ha ido de menos a más, pero que, una vez encontrado el camino de la meta rival, se ha convertido en el combinado más realizador hasta el momento. En todo caso, no le corresponde el papel de favorito al cuadro hispano, lo que también podría considerarse como una ventaja.


Ambos equipos concurren al envite con una sensible baja por cada contendiente. Sin duda, la más importante la que corresponde al bando transalpino, tras la rotura del tendón de Aquiles de Leonardo Spinazzola, una de las sensaciones del campeonato. Le reemplazará Emerson Palmieri, flamante campeón continental con el Chelsea.


Por el lado español, Luis Enrique no podrá contar con Pablo Sarabia, aquejado de una dolencia muscular y uno de los revulsivos utilizado por el técnico asturiano que mejor resultado le había dado hasta el momento en la reacción del equipo tras los dos empates frente a Suecia y Polonia. Dani Olmo gana enteros para estar en el equipo titular.


No serán las únicas novedades en ambos onces. Florenzi podría regresar al lateral derecho tras cuatro encuentros ausente por unas dolencias musculares, en detrimento de Di Lorenzo, mientras que todo apunta a que Mancini mantendrá en el centro del campo a Verratti y en ataque al eléctrico Chiesa.


Luis Enrique también se plantea algunas variaciones, como volver a dar entrada a Eric García en el eje de la medular, lo que relegaría a Pau Torres al banquillo, mientras que el resto del bloque se mantiene intacto al de anteriores compromisos.