La jornada en Segunda: semana fantástica para los líderes, trágica para los colistas

Almería y Eibar han sido los grandes vencedores de la 12ª jornada y, sobre todo, de esta primera semana de la temporada con triple partido. El equipo andaluz mantiene el liderato, pese a haber comenzado tropezando en, precisamente, Ipurua. Y el Eibar, el único equipo que ha firmado el pleno con tres victorias –y ya son diez jornadas consecutivas en positivo–, se apodera de la segunda plaza. Los dos, además, se distancian de sus perseguidores.

En el fondo de la clasificación también se agudizan las tendencias. Los dos últimos clasificados, Amorebieta y Alcorcón, han sido los peores de esta triple jornada, en la que apenas han sumado un punto. El mismo resultado del Leganés, que hace quince días estaba fuera de descenso y ahora es tercero por la cola y, dependiendo de lo que hagan hoy Girona y Zaragoza, podría verse hasta a cuatro puntos del 18º.

También ha habido equipos que han aprovechado la semana para tomar oxígeno. Como el Burgos que, con su primera victoria a domicilio de por medio, ha sumado siete puntos. Una cifra que sólo mejora el Eibar y que aupa a los castellanos hasta la décima plaza. El caso opuesto es el de Sporting, Tenerife –tres puntos de nueve– y, sobre todo, Ponferradina. Lo había hecho tan bien hasta ahora que aguanta en zona de promoción pero encadena ya seis partidos sin ganar y en esta triple jornada sólo los tres colistas lo han hecho peor. Ha sumado dos puntos tras empatar con Fuenlabrada y Zaragoza y caer ayer con el Oviedo. Claro que, posiblemente, el disgusto de Bolo salvó al Cuco Ziganda, que llegaba muy cuestionado al Toralín tras haber enlazado cinco empates y una derrota.

El que nota ahora las orejas rojas es Lolo Escobar, después de que el Mirandés haya encadenado en Anduva un empate y cuatro derrotas.

Goles sin los «pitxitxis»

La última, el 1-4 que le endosó ayer el Almería para recuperar el liderato, en una jornada ciertamente curiosa en el plano goleador. Ninguno de los tres máximos realizadores marcó. Ni Stoichkov, al que reservó Gaizka Garitano y no llegó a saltar al campo; ni Rubén Castro, que sí disputó los noventa minutos en Ipurua; ni Sadiq, que fue suplente en Anduva y disputó la última media hora. Claro que el relevo del nigeriano hizo que el Almería no le echara de menos: en su primer partido como titular, Dyego Sousa firmó un hat-trick.

El ariete portugués fue uno de los responsables de que la 12ª jornada haya igualado el récord goleador de la 5ª, con todavía un partido por disputar. 32 goles se han marcado en diez partidos, ninguno ha acabado con empate a cero –sólo había sucedido en otras dos ocasiones– y sólo dos equipos, menos que nunca, se han quedado sin marcar, Lugo y Alcorcón.

Y eso que, además de saldarse sin goles de los «pitxitxis», la jornada también ha acusado la ausencia de muchos jugadores con olfato de gol. ELas Palmas ha llegado a afrontar algún partido sin los futbolistas que habían marcado el 85% de sus goles. De hecho, Jonatan Viera y Peñaranda no estarán disponibles en aproximadamente ocho semanas.

Lesiones

Y es que las lesiones se han multiplicado en esta última semana de triple jornada. La más grave ha sido la de Franchu Feuillassier, que se lesionaba el pasado martes en el Heliodoro. No pintó bien desde el principio y un par de días después se confirmó que el jugador del Eibar sufre una rotura completa del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda, que le obligará a pasar por el quirófano y le tendrá de baja toda la temporada.

El problema es que el físico de los futbolistas volverá a ponerse al límite sin haberse apenas recuperado de este último esfuerzo. La próxima semana, entre el 31 de octubre y el siete de noviembre, volverán a disputarse tres encuentros.

Antes tendrá que acabar ésta, a la que todavía le queda un partido, el que enfrentará esta noche a Girona y Zaragoza y que los maños también afrontan con la ausencia, previsiblemente hasta enero, por lesión de Juanjo Narváez, el único delantero de su plantilla que ha marcado algún tanto hasta ahora. No es de extrañar que el equipo de JIM sea el menos goleador de la categoría –siete goles en once jornadas– aunque al menos rentabiliza sus tantos, al ser también el que menos encaja, apenas nueve. Unas cifras que le han convertido en el rey del empate: siete, como el oviedo, aunque en el caso del equipo maño han sido consecutivos. Si hoy enlaza el octavo supondrá un récord del que difícilmente presumirá su entrenador, hasta el punto de que puede costarle el puesto.

Lío en Leganés

Tampoco debe tenerlas todas consigo Asier Garitano pese a que su trayectoria en el Leganés pueda ampliarle el crédito. Ya empieza a oir silbidos aunque todavía son mayoría sus apoyos en la grada. Ahora tiene un problema añadido a la pobre trayectoria del equipo, el lío con Borja Garcés. El delantero le solicitó permiso la semana pasada para viajar a Melilla a la boda de su hermano. Garitano lo denegó, al ser Garcés su único delantero disponible y con el choque ante el Tenerife al día siguiente, y también lo hizo el club cuando el futbolista se lo pidió, ante la negativa del técnico. Bien, pues pese a la doble negativa, Garcés cogió el avión para un viaje exprés a Melilla. Que le permitió acompañar a su hermano pero le dejará fuera del equipo, al menos mientras lo dirija Garitano. «Mientras yo esté aquí, este chico no volverá a vestir la camiseta del Leganés», ha afirmado el técnico guipuzcoano.

Ha habido más líos esta semana aunque la mayoría han tenido que ver con los árbitros. Hubo enfado en el Eibar por la acción que se saldó con la expulsión de Toño tras encararse con Álex Gallar –que siguió en el campo, al igual que su compañero Bodiger, que había originado la tangana al pisar a Quique– y la zancadilla a Corpas en el área que ni siquiera revisó en el VAR. Lo hubo en el Amorebieta por lo sucedido en Fuenlabrada, donde quedaron sin sanción una mano de Juanma y un golpe de Mbia a Óscar Gil, ambas en el área.

Iñigo Vélez se mostraba muy crítico, no tanto por la decisión del árbitro sino, como sucedería dos días después en Ipurua, por el aparente silencio del VAR en dos acciones que parecieron claras en las repeticiones televisivas. También el miércoles había sido el Leganés el que protestó públicamente por el penalti que supuso el primer gol del Alcorcó y por el que se comió después el árbitro sobre Gaku. Tres días después fue precisamente su rival, el Tenerife, el que alzó la voz. «O las imágenes están trucadas o no entiendo nada», llegó a afirmar su entrenador Luis Miguel Ramis después de que el árbitro diese por válido el gol del Leganés, que previamente había anulado, tras la indicación de la sala VAR.