«Correr el Mundial no es mi sueño, mi sueño es quedar campeón de MotoGP»
Xabi Zurutuza (Legazpi, 2006) peleará este fin de semana por lograr el título europeo de la Hawkers Talent Cup y el año que viene correrá el Mundial junior con el equipo italiano MTA. El piloto guipuzcoano no para de subir peldaños y a pesar de su juventud tiene muy claro lo que quiere.
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Xabi Zurutuza atiende la llamada de NAIZ desde el circuito de Cheste (Valencia), donde prepara ls dos últimas carreras de la Hawkers European Talent Cup, que se disputarán el domingo.
Lleva subido a una moto desde antes de cumplir los tres años y es muy ambicioso en sus objetivos, aunque sabe que llegar a la élite exige mucho esfuerzo y no es un camino sencillo.
Bueno, ¿quién es Xabi Zurutuza?
Tengo 15 años y estudio 4º de la ESO en el instituto Olazabal de Legazpi. Voy poco a clase, con esto de las carreras, pero intento llevarlo todo un poco al día y luego, como falto mucho, me ayudan, me ponen más tarde los exámenes y eso.
¿Cómo empezaste en esto de las motos? Porque aquí no hay tanta afición como en otros lugares…
En mi familia mi padre y mis dos hermanos mayores siempre han andado en moto, siempre ha habido motos en casa, de monte y de carretera. Estaba claro que no iba a salir futbolista (se ríe).
Me empezó a gustar desde muy pequeño, cogí mi primera moto a los dos años y medio, un quad que me regalaron con el Olentzero. Al principio andaba en alguna campa de Legazpi, en alguna explanada, y hasta ahora no he parado.
Después de ese arranque te picó el gusanillo de la velocidad…
Con cinco años me apuntaron a una escuela de pilotos de Navarra, que estaba en Castejón. Y allí estuvimos hasta los 11 años. Íbamos todos los fines de semana, teníamos una caravana y dormíamos allí.
Corríamos un campeonato que se llama Liga Interescuelas. Nos fue bastante bien, aunque no daban premios ni nada. Chicho Lorenzo, el padre de Jorge Lorenzo, tenía escuelas por toda España, y se reunían todos para hacer carreras. Se trataba de coger la base, había muy buen nivel. Entre todas las categorías igual nos juntábamos doscientos pilotos.
Con 12 años subes otro escalón…
Con 12 años dimos el salto al Campeonato de España de 65 centímetros cúbicos. Era una moto un pelín más grande. Hicimos un año de eso, y luego el Campeonato de 85 centímetros cúbicos, en 2018. Quedé campeón. Y de ahí saltamos a los 250 centímetros cúbicos.
En 2018 corrimos también la Cuna de Campeones, que es el equipo en el que estoy ahora, que si quedas entre los tres primeros te becan para el año siguiente.
En 2019 teníamos un proyecto pero no salió, y me quedé corriendo Supermoto de 250, que quedé campeón.
Estamos hablando de motos grandes y potentes…
Sí, con la que corro este año puede llegar a 230 kilómetros por hora de velocidad punta.
En las fotos no pareces físicamente grande. ¿Cómo se domina una máquina de ese tamaño?
Con la que corro yo el Europeo es bajita, tampoco es muy alta. Pero la que sí cuesta es la de Supermoto 250, que son motos de motocross puestas para pruebas de asfalto. Esas son altas, aunque con técnica se dominan bastante bien.
En parado además tenemos el ‘holeshot’, un cacharro que hace bajar las motos para las salidas, y entonces no tienes problema.
Y llegamos a 2021, al presente, y te vemos peleando por el título en la Hawkers European Talent Cup…
Estoy a 11 puntos del primero y quedan 50 en juego, dos carreras que se corren este domingo. Luchando, con muchas opciones de quedar campeón. Cheste es un circuito que se me da muy bien, estoy con muchas ganas.
Vamos todos con la misma moto, una Moto3 del año 2012, todos igual.
Para el año que viene has firmado con el equipo italiano MTA…
Sí, voy a correr el Mundial junior de Moto3, que es la antesala al Mundial.
¿Es muy difícil llegar hasta arriba?
Si eres bueno subes.
Supongo que el sueño es correr el Mundial…
Sí, claro. Bueno, correr el Mundial no es mi sueño, mi sueño es quedar campeón de MotoGP.
¿Tienes algún ídolo?
Mi ídolo es Marc Márquez. Se parece mucho a mi estilo de pilotaje, y luego como persona es muy humilde. Me gusta ser agresivo y derrapar.
Progresar en un deporte como este requiere mucho esfuerzo y renunciar a muchas cosas. ¿Cómo es tu semana tipo?
Los lunes, los miércoles y los jueves entreno en el gimnasio con mi tío, que es mi preparador físico. Y los viernes a la tarde ya salimos hacia algún circuito: Motorland, Zuera, Catalunya… Y allí pasamos el fin de semana, entrenando.
Así que nada de salir con los amigos, fiestas, cumpleaños…
Nada, nada, eso para mí no existe. Lo llevo bien, a mí solamente me gustan las motos, lo de la fiesta y eso no me va.
Todo esto, los viajes, las motos, el material, tiene un coste económico…
Es un deporte muy caro. Este año tenemos bastantes patrocinadores, empresas del entorno, de Gipuzkoa. También una discoteca de Ibiza, Privilege.