Jasper Philipsen gana en Baiona para cerrar un inicio marcado por la afición vasca
El sprinter del Alpecin-Deceuninck se ha impuesto a Phil Bauhaus (Bahrain) y a Caleb Ewan (Lotto Dstny) en la primera llegada masiva del Tour tras una jornada en la que los corredores se lo han tomado con mucha tranquilidad y han disfrutado una vez más de un ambiente espectacular.
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Jasper Philipsen (Alpecin-Deceuninck) ha ganado la tercera etapa del Tour disputada en su integridad en Euskal Herria, con salida en Amorebieta-Etxano y llegada a Baiona tras 193,5 kilómetros al imponerse en el sprint de un gran pelotón en el que han entrado todos los favoritos. Adam Yates mantiene el maillot amarillo tras un tercer baño de masas de los ciclistas con los aficionados vascos.
Fue lo más destacado de la jornada, como en las dos anteriores, la cantidad de aficionados que con sus ikurriñas, sus camisetas naranjas y sus banderolas de apoyo a los presos políticos vascos han llenado las carreteras de inicio a fin, sobre todo en los puertos, los pueblos y en el segundo paso de la carrera por Donostia.
Que un corredor de la experiencia en grandes vueltas como Mark Cavendish y que vivió el apoteósico inicio del Tour en su casa, en Inglaterra, en 2014, destacara en Eurosport y en las redes sociales que el ambiente vivido estos días en Euskal Herria no lo había visto antes nunca demuestra lo que han sentido todos los corredores estos tres días.
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«Querido Euskal Herria, tenéis el terreno más brutal para andar en bici, pero tenéis los aficionados más increíbles del mundo, que dan los recuerdos más maravillosos a los ciclistas que os visitan. Gracias», ha transmitido en sus redes sociales con un corazón naranja como emoticono el ciclista que busca en su último Tour batir el récord de 34 victorias que comparte con Eddy Merckx.
Otra fuga de Powless
Neilson Powless ha sido protagonista de la escapada que ha formado en el primer kilómetro con Laurent Pichon (Arkéa) y, como en la segunda etapa, ha reforzado su liderato de la montaña al pasar en cabeza todos los puertos de la etapa, con celebraciones con los aficionados. Al ser dos los escapados, los equipos de los sprinters han manejado la etapa con tranquilidad sin más movimiento que el de Victor Lafay para pasar tercero en el sprint intermedio de Deba para intentar mantener el maillot verde, con cuarto puesto para Mads Pedersen al superar al resto de corredores que quieren disputar esta clasificación.
No han superado los tres minutos de renta y tras asegurarse todos los puntos de la montaña, Powless se ha despedido en Donostia de Pichon para no gastar más energías. El corredor del Arkéa ha seguido en solitario para llevarse el premio de la combatividad hasta que ha sido atrapado a falta de 37 kilómetros para disputar el primer sprint de este Tour.
La cuarta etapa ofrece otra oportunidad para los velocistas, con 181,8 kilómetros entre Dax y Nogaro y una única cota de Cuarta en el recorrido antes de afrontar las dos jornadas de Pirineos el miércoles, con un nuevo paso por Euskal Herria antes de subir el Soudet y Marie Blanque, y el jueves, con Aspin, Tourmalet y el primer final en alto en Cauterets.