La madera salva a Estados Unidos ante una magnífica Portugal
Países Bajos acaban al frente del Grupo E tras golear a la humilde Vietnam (0-7). Un gran partido permite a Portugal empatar con la tetracampeona (0-0), que llega a octavos con su arranque más pobre de la historia.
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Qué poquito ha faltado para que las 41.000 personas que se han citado en el Eden Park de Auckland presenciaran una campanada histórica. El palo ha salvado en los últimos minutos a Estados Unidos, tetracampeona y pisando podio en todas las ediciones del Mundial, de quedar eliminada en fase de grupos a manos de una magnífica Portugal, que no ha tenido premio a su gran partido, más allá de la satisfacción de haber empatado y tenido contra las cuerdas a la selección norteamericana.
Le bastaba un punto al equipo de Andonovski y eso es lo que ha conseguido, y gracias, para acabar en la segunda plaza del Grupo E, por detrás de Países Bajos, que sí ha cumplido sobradamente. La subcampeona ha goleado a una pobre Vietnam para hacerse con el liderato y asegurarse, en teoría, un cruce mejor en octavos.
Portugal, 0 - Estados Unidos, 0
Estados Unidos llega a octavos firmando la peor fase de grupos de su historia, en la que solo ha sido capaz de derrotar a la debutante Vietnam. Y buena parte de la responsabilidad la tiene Portugal, que ha estado en un tris de dar la campanada. Las portuguesas, debutantes en la competición, estuvieron por debajo de lo esperado en su estreno ante Países Bajos pero el buen juego y la victoria contra Vietnam les dio la convicción que necesitaban y un objetivo inicialmente impensable por el que pelear, la clasificación a octavos. «Solo» tenían que derrotar a Estados Unidos y nadie ha creído más que Portugal que era capaz de hacerlo.
Superior tácticamente, durante muchos minutos ha parecido que la selección europea tenía más futbolistas sobre el césped que su rival. Ha estado incomodísima Estados Unidos durante todo el partido. Tiene grandísimas jugadoras y eso le ha salvado pero las portuguesas han jugado mucho mejor. En el primer tiempo, Pereira casi no ha visto el balón de cerca, apenas en los remates de Williams al cuarto de hora y en el 27. A Portugal le costaba ese último pase pero también ha encontrado la manera de inquietar a la zaga rival, sobre todo con balones a la espalda como el que ha estado a punto de aprovechar Jessica Silva, que ha acabado cruzando demasiado su remate.
A Portugal se le veía, sobre todo, convencida de lo que estaba haciendo, capaz de plasmar sus muy claras ideas. Estados Unidos, por el contrario, se veía en un mar de dudas. La principal para el espectador, de cara a la segunda parte, pasaba por saber si a las lusas les aguantaría el físico con el importante despliegue que estaban realizando. Porque si en algo no ha cambiado Estados Unidos es en la superioridad atlética de sus futbolistas con respecto a la mayoría de sus rivales, lo que le convierte en un adversario especialmente peligroso en la recta final de los encuentros.
Pero precisamente han sido las norteamericanas las que han sufrido en la recta final. No ha tenido Vlatko Andonovski capacidad de reacción en el descanso y sí algo más sus futbolistas, que han entrado al campo algo más intensas e incisivas. Pero el centro del campo seguía bien cubierto por su rival, con lo que la tónica se mantenía.
Conforme se acercaba el final, a Portugal le ha tocado dar un paso adelante en busca del gol que premiase a lo grande su gran trabajo. Estados Unidos ha tratado de aprovechar sus huecos pero, de manera muy inhabitual, le ha pesado más el miedo de saberse a un gol del avión de vuelta. Han aparecido los nervios en las áreas, incluso entre las más veteranas como Naeher, que se ha comido una falta botada por Portugal en una muy mala salida, sobre todo después de que en el 91 Ana Capeta, que apenas llevaba dos minutos en el campo, haya congelado el tiempo con un remate raso que se estrellaba en la base del poste de la portería norteamericana. Se ha encorajinado Portugal, se ha achicado Estados Unidos y se ha agotado el tiempo, ya escaso, sin que el sorpresón acabara de producirse.
Se marchaban entre lágrimas las portuguesas, que pronto las tornarán en orgullo, y entre suspiros de alivio y preocupación las norteamericanas.
Portugal: Pereira; Tatiana Pinto, Borges, Carole Costa, Gomes, Amado (Marchao, min.89); Dolores Silva; Jessica Silva, Kika (Andreia, min.62), Norton (Encarnaçao, min.81); y Diana Silva (Capeta, min.89).
Estados Unidos: Naeher; Fox, Girma, Ertz, Dunn (O’Hara, min.96); Lavelle, Sullivan, Horan (Sonnett, min.84); Williams (Rodman, min.84), Morgan (Thompson, min.96) y Sophia Smith (Rapinoe, min.61).
Árbitra: Rebecca Welch (Inglaterra). Amarilla a Carole Costa (56’), Diana Gomes (72’), Amado (86’); Lavelle (39’), Sophia Smith (52’) y Girma (81’).
Incidencias: Partido de la tercera jornada en el Grupo E, disputado en el Eden Park de Auckland ante 40.958 espectadores
Vietnam, 0 - Países Bajos, 7
La subcampeona mundial se clasifica para octavos con brillantez. Países Bajos ha ido de menos a más en esta fase de grupos y tras ganar con lo justo a Portugal, la solidez le dio un punto ante Estados Unidos y hoy ha goleado a, tampoco hay que obviarlo, la selección más débil de este torneo; una Vietnam que regresa a casa con la única satisfacción de haber debutado en el torneo.
Ha seguido el camino inverso a las neerlandesas el conjunto asiático, que empezó cayendo pero sin estrépito ante Estados Unidos –la última edición arrancó con un histórico 13-0 de las norteamericanas a la tambiém debutante Tailandia–, se vio muy en la que se percibía su oportunidad contra Portugal y hoy ha sucumbido ante un rival que para el cuarto de hora ya había marcado tres goles.
Aunque un empate le clasificaba, Países Bajos ha salido a por la victoria, el primer puesto y una actuación que le permitiese llegar a octavos con la moral en su punto óptimo. Lo ha conseguido todo. Martens ha abierto el marcador en el ocho, Snoeijs ha ampliado distancias tres minutos después y un golazo de Brugts elevaba a tres la renta oranje recién superado el cuarto de hora.

Roord se ha sumado a la fiesta mediada la primera parte y aunque Mai Duc Chung, que con este partido pone fin a una larguísima carrera en los banquillos, hacía sus primeros cambios en defensa antes de cumplirse la media hora, de nada le ha servido a Vietnam, que justo antes del descanso encajaba el quinto.
Se ha mantenido la tónica tras el descanso aunque las neerlandesas ya «solo» han marcado dos goles más –tres, en realidad, aunque a Martens se lo han anulado por ajustadísimo fuera de juego–. Brugts hacía el sexto al cuarto de hora, otro golazo desde la frontal similar al que había anotado en el primer tiempo, y un cabezazo de Roord ha establecido el definitivo 0-7.
Líder del Grupo E, el equipo de Damaris Egurrola –que ha entrado al campo en la segunda parte– disputará su partido de octavos el próximo domingo. Se enfrentará al segundo clasificado del Grupo G, que se resolverá mañana y que llega a la última jornada de la fase de grupos con todos sus integrantes –Suecia, Italia, Sudáfrica y Argentina– con opciones de clasificación.
Vietnam: Kim Thanh (Thi Hang, min.46); Thu Thao, Thu Thuong (Thi Kieu, min.28), Diem My, Thi Thu, Thi Loan (My Anh, min.28); Bich Thuy (Tuyet Dung, min.60), Hai Linh, Thi Van, Thanh Nha; y Hai Yen (Huynh Nhu, min.60).
Países Bajos: Van Domselaar; Spitse, Van der Gragt, Janssen; Pelova (Casparij, min.46), Roord, Groenen (Damaris, min.62), Van de Donk (Kaptein, min.46), Brugts (Van Dongen, min.80); Snoeijs y Martens.
Árbitra: Ivana Martincic (Croacia). Amarilla a Thi Van (83’).
Goles: 0-1, min.8: Martens. 0-2, min.11: Snoeijs. 0-3, min.17: Brugts. 0-4, min.23: Roord. 0-5, min.45: Van de Donk. 0-6, min.57: Brugts. 0-7, min.83: Roord.
Incidencias: Partido de la tercera jornada en el Grupo E, disputado en el Estadio Dunedin ante 8.215 espectadores.
Última jornada en el Grupo G
Hoy también quedará resuelto el Grupo G, con la disputa de sus dos últimos partidos China-Inglaterra y Haití-Dinamarca, ambos a partir de las 13.00. Todos tienen opciones de pasar a octavos, incluso Haití aunque llegue a cero. Al campeón europeo le basta el empate y Dinamarca depende de sí misma aunque todo lo que no sea ganar le puede complicar la vida porque tiene los mismos puntos que China. El equipo caribeño necesita una carambola: imponerse a Dinamarca por más de dos goles y que gane Inglaterra, que parece más factible.