La Euroliga «investigará a fondo» la denuncia de un «intento de soborno» de un árbitro

El árbitro ucranio Mykola Ambrosov, que fue miembro del equipo arbitral en la final de la Eurocup de 2021 entre Unics Kazan y Mónaco, ha acusado en una entrevista a dos de sus compañeros de intentar sobornarlo con 10.000 euros.

Más concretamente, Ambrosov ha hablado de lo sucedido en la víspera del partido de vuelta de la final de la Eurocup de 2021, donde se enfrentaron Unics Kazan y el AS Mónaco y que, pese a todo, acabó con triunfo del equipo del Principado.

A cuenta de ello, la Euroliga ha indicado mediante un comunicado que «abrirá una investigación interna para esclarecer el contenido de las declaraciones del árbitro ucranio Mykola Ambrosov».

Con todo, y aunque ha añadido que «una vez finalizada la investigación interna, la Euroliga hará público su resultado, y si se encuentran pruebas, aplicará todas las medidas o sanciones necesarias contra cualquier persona que pueda haber estado involucrada», no ha perdido la oportunidad para curarse en salud.

Es decir, el comunicado se ha apresurado en subrayar que «Euroleague Basketball sigue un protocolo de seguimiento muy estricto para garantizar que todos los partidos se disputan en un entorno incuestionable de Fair Play, practicando una política de tolerancia cero con el soborno y la corrupción», al tiempo que ha garantizado que «los estándares de integridad de todos los árbitros se basan en una fuerte adhesión a los principios y valores morales y éticos, como la honestidad, el honor, la responsabilidad y la honradez».

El relato

El cuadro monegasco había ganado por 89-87 en el choque de ida de aquella final de la Eurocup 2021. Según ha afirmado Ambrosov, unos días antes del partido, su compatriota Boris Ryzyk le dijo «en clave» que le ofrecía 10.000 euros por pitar a favor del Unics Kazan, estando también implicado en la misma el árbitro griego Ilias Koromilas en esa «supuesta transacción».

«Lo que voy a decir puede sorprender a muchos, pero así fue como sucedieron las cosas: tres días antes del partido recibí una llamada del árbitro más famoso de Ucrania, Boris Ryzyk. Me dice que en la final juega el Unics, que tiene un entrenador griego y un asistente griego», ha recordado el colegiado en una entrevista íntegramente realzada en ucranio, pero con subtítulos en inglés.

«(A Ryzyk) Se le acercó Ilias Koromilas, también griego y árbitro de la Euroliga, e intentó a través de él llegar a un acuerdo conmigo. Si accedía, entonces Koromilas hablaría directamente conmigo para "arreglar" la victoria de Unics Kazan», ha añadido.

«No le dije nada a Rizik y me dijo que lo pensara durante 24 horas. Si cambiara de opinión y todo saliera según lo planeado, obtendría 10.000 euros. Incluso me dio un número de Viber para llamar después del partido», ha concluido.

Ambrosov, según sus declaraciones, rechazó la oferta y no accedió a hablar con el mentado Koromilas. Es más, ha subrayado que el AS Mónaco se impusiera 83-86 en el partido jugado en tierras tártaras presupone que no fue sobornado. «Todos conocen el resultado: Mónaco ganó por tres puntos…», ha concluido.

Nikola Mirotic, a Milano

En otro orden de cosas, el ala-pívot hispano montenegrino Nikola Mirotic jugará en el Olimpia Milano hasta 2026, después de desvincularse del Barcelona, donde pasó los cuatro cursos anteriores.

Luego de que se especulase con su posible llegada al Partizan de Belgrado de Zeljko Obradovic y de que incluso se el proipio jugador reportase «amenazas» a él y a su familia, convirtiéndose su frustrado fichaje en un culebrón con el club serbio, que replicó al ala-pívot que este, pese a haber ido cambiando las condiciones ya pactadas de su contrato, «decidió no firmar por un motivo desconocido pese a haber dado su palabra a Obradovic, Mijailovic, Savic y el capitán Kevin Punter de que se convertiría en jugador del equipo».

Al final, el jugador surgido de la cantera del Real Madrid jugará para Ettore Messina en tierras lombardas.