Victor Campenaerts, vencedor en «la crono de la fuga» en la 18ª etapa del Tour
El especialista en contrarreloj se ha impuesto a Kwiatkowski y Vercher en una jornada con cinco puertos de tercera categoría. Oier Lazkano, quinto con cuatro puntos más para la clasificación de la montaña, y Álex Aranburu, 14ª, han vuelto a estar en la fuga de 36 corredores del día.
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El flamenco Victor Campenaerts (Lotto), de 32 años, ha pasado de ser gregario y trabajador de equipo para ser el gran protagonista del Tour en esta 18ª etapa entre Grap y Barcelonnette, con cinco puertos de tercera categoría. El especialista contra el crono, que se ha quedado en un trío final con Michal Kwiatkowski (Ineos) y Matteo Vercher (TotalEnergies), ha dado muy buenos relevos y después ha utilizado su mayor potencia en los últimos metros para imponerse al sprint por delante del experimentado corredor polaco y del debutante francés de 23 años y ha logrado su primera victoria en la ronda gala al poco de haber sido padre.
Los tres han sido parte de la fuga del día, compuesta por 36 corredores y entre los que estaban los incombustible Oier Lazkano y Álex Aranburu, ambos del Movistar. Los dos corredores vascos se están dejando ver en la ronda gala. Lazkano, además ha obtenido 4 puntos más en la clasificación general de la montaña al ser el primero en dos puertos puntuables del día y ha finalizado en un más que meritorio quinto puesto, en un grupo que ha cruzado la meta a 22 segundos del trío cabecero. Álex Aranburu se ha quedado algo más atrás, 14º, a 37 segundos.
Por detrás, el pelotón, entre los que estaban los favoritos de la general, se lo ha tomado con mucha calma –han ido comiendo incluso M&M'S– y ha cruzado la línea de meta a 13:40. Será la última vez que esto ocurra, ya que este viernes comienzan las últimas oportunidades para desbancar a Tadej Pogacar (UAE) del liderato antes de llegar la crono del domingo en Niza que pondrá punto y final al Tour 2024.
La fuga de la fuga
La 18ª etapa, de media montaña con cinco puertos de tercera, era ideal para una fuga. Y así ha sido. En ella han entrado 36 corredores, entre los que estaban, una vez más, los Movistar Oier Lazkano y Álex Aranburu, junto con gente importante con opciones de pelear por el triunfo como Michal Kwiatkowski, Wout Van Aert, Ben Healy o Geraint Thomas.
Lazkano ha peleado en los primeros dos puertos por el sprint intermedio con el fin de obtener puntos para la general de la montaña. Así, ha logrado dos puntos en Col de Festre (3ª categoría), a 147 kms de meta, y otros dos en Cote de Corps (3ª categoría), a 122 kms de meta.
Los fugados han ido aumentando paulatinamente su diferencia respecto al pelotón de favoritos. Así, de los 7 minutos de diferencia que tenían a falta de 70 kms, se ha pasado a 10:40 a falta de 47,2 kms.
Dentro del grupo amplio de fugados ha habido intentos de romper la escapada, pero ni Ben Healy, ni Sean Queen, ni Johannessen, ni Alex Aranburu han tenido fuerzas suficicientes.
Ha tenido que ser Kwiatkowksi, antes de coronar el último puerto puntuable (a 40 kms), quien ha dado el arreón definitivo. Más adelante se ha hecho el trío, con Campenaerts (Lotto) y Vercher (TotalEnergies) uniéndose al polaco.
Por detrás iba Lazkano en un grupo de cinco hombres con Hindley, Lemmen, Neilands y Skujins, a unos 16 segundos, pero esta diferencia ha ido aumentando; nunca rebajando. Aranburu, mientras, iba aún más atrás.
Por delante, el trío cabecero ha hecho muy buenos relevos. En este aspecto hay que tener en cuenta que la aerodinámica de Campenaerts, especialista contra el crono, ha sido diferencial para aumentar la renta con los perseguidores.
Al flamenco aún le han restado fuerzas para lanzar el último y definitivo sprint. Vercher, con nada que perder y mucho que ganar a 800 metros de la meta, ha sido el primero en intentarlo con el objetivo de sorprender a los veteranos, pero han cogido su rueda. Mientras Kwiatkowski miraba atrás para ver la sombra de Campenaerts, el flamenco se ha levantado de su bicicleta y no ha parado hasta cruzar la línea de meta, donde le esperaba su mujer e hijo al otro lado del móvil para felicitarlo por su gesta.