Puck Pieterse se presenta en sociedad batiendo en Lieja a la mismísima Vollering

La cuarta etapa del Tour Femenino, entre Valkenburg y Lieja, debía brindarle la victoria a una corredora especialista en las clásicas, toda vez que la etapa, de 122,7 kilómetros, ha transcurrido por los Países Bajos, por las carreteras por donde discurre la Amstel Gold Race y Flandes, con pasos como La Redoute, de la Lieja-Bastoña-Lieja. Y cuando parecía que Demi Vollering iba a dar otra demostración de poderío incontestable, hete aquí que la joven Puck Pieterse, de 22 años, ha sido capaz de sostener no solo el ataque de la líder del Tour, junto con la polaca Katarzyna Niewiadoma, sino que ha conseguido batir al sprint a la mismísima Vollering en la meta de Lieja.

En una photo finish que ha hecho reverdecer aquel hiperbólico dicho del «por medio tubular», pero así lo ha hecho, presentándose en sociedad sumando la victoria más importante de su corta carrera en una prueba de fondo en carretera.

Porque hasta la fecha, Pieterse se ha destacado con la bicicleta de montaña, siendo la vigente campeona de Europa y bronce en el Mundial de 2023. Asimismo, el ciclocross tampoco se le ha dado mal a la ciclista del Fenix Deceuninck, siendo medalla de plata del Mundial de 2023 y bronce en la última edición.

Aparte de la victoria de etapa, Puck Pieterse ha ascendido a la segunda posición de la general del Tour, a 22 segundos de una Demi Vollering que, pese a esta inesperada «derrota», ha afianzado a partir de La Redoute su poderío y su condición de patrona de la «Grande Boucle».

Katarzyna Niewiadoma, del Canyon, ha sido la más respondona a los movimientos de Vollering, especialmente cuando se ha decidido a moverse en la última ascensión a Roche-aux-Faucons, pero en el momento de la llegada, la polaca, sabedora de que es más lenta que sus rivales, ha apresurado su ataque y pronto se ha quedado sin opciones cuando las dos neerlandesas se han lanzado al ataque en pos de la victoria.

«Cara de poker»

«Me he encontrado con piernas muy buenas en los últimos días y, bueno, superar al sprint a Demi –Vollering– es un sueño hecho realidad. Imaginaba que "Kasia" –Niewiadoma– iba a atacar antes del sprint y que Demi iba a saltar a su rueda, por lo que he decidido poner cara de poker y esperar mi momento. Aún y todo, creo que he sprintado un poco pronto, y para el final casi ni veía la línea de meta, y además los jueces han tardado una eternidad en decidir quién ha ganado. Pero aun así, estoy supercontenta», ha declarado la protagonista de la cuarta etapa del Tour Femenino.

Las cotas breves pero duras y la lluvia han endurecido esta cuarta jornada. La burgalesa de Movistar Sara Martín ha sido una de las valientes que más lejos ha llegado en una suicida aventura en solitario, con la anécdota de que ha tenido que verse parada en un paso a nivel a cuenta del transitar pesado de un tren. La carrera aún no estaba caliente del todo, pero en las siguientes subidas, las primeras de la Lieja-Bastoña-Lieja, han terminado con la aventura de la ciclista de Aranda de Duero.

Ya para entonces Demi Vollering y su grupo han empezado a tensar poco a poco la cuerda, dejando un pelotón cada vez más menguante, con una Ane Santesteban que, como mejor representante vasca, ha aguantado hasta después de La Redoute, cuando las principales favoritas han empezado a poner el listón de la carrera cada vez más alto.

Y en estas, con la etapa en su último tramo, la subida a Roche-aux-Faucons ha supuesto el golpe con el que Demi Vollering se ha quitado de encima a sus más inmediatas perseguidoras, arrastrando consigo a una veterana como Katarzyna Niewiadoma y a una insolente joven llamada Puck Pieterse, que han aguantado los envites de la neerlandesa sin aparentes agobios, al punto de que la polaca incluso se ha atrevido a apretar en los últimos metros de la subida.

Todavía restaban kilómetros hasta la meta de Lieja y no pocas aspirantes han intentado enjugar su desventaja respecto de un trío que se ha arreglado bien y que en los metros finales ha saludado el triunfo de una Puck Pieterse que se ha presentado en sociedad con un triunfo de enorme prestigio.

El Tour continúa su camino con otra etapa llana, entre Bastoña y Amneville, de 152,5 kilómetros, tras los cuales, superando una cota de tercera y cuatro de cuarta categoría, las ciclistas al fin pisarán suelo francés, concretamente en la Lorena, cerca de Metz.