Henry Pollock, el flanker rubio, joven y duro de los Saints que aspira a ganar la Champions
El tercera línea inglés, que ha explotado este curso, será una de las piezas clave en el duelo por el cetro continental que enfrentará a Northampton y Bordeaux-Bègles –que cuenta con el vasco Maxime Lucu– este sábado en Cardiff. Por su parte, Bath y Lyon disputarán la final de la Challenge Cup.
You have run out of clicks
Cardiff acoge este fin de semana las finales continentales de rugby. Abren el fuego esta noche Bath y Lyon (21.00), que pugnarán por suceder a los Sharks de Durban en el palmarés de la Challenge Cup.
Bath, con el apertura escocés Finn Russell al mando de las operaciones, lidera la Premier inglesa con una amplia ventaja sobre sus perseguidores y parte como favorito frente a un irregular conjunto francés, que tuvo que cambiar de entrenador a mitad de temporada y que marcha undécimo en el Top 14, aunque está a solo 4 puntos del sexto.
Este será el aperitivo de un doble duelo anglo-francés que tendrá continuidad mañana a partir de las 16.45, con la inesperada e inédita final de la Champions Cup entre Northampton Saints y Bordeaux-Bègles (UBB). En las filas bordelesas milita Maxime Lucu, medio melé de Senpere al que las principales mieles deportivas –tanto con la selección francesa como a nivel de clubes– le están llegando pasada la treintena.
Un club joven frente a un clásico
La UBB, nacida en 2006 de la fusión de dos clubes, tiene al alcance de la mano el primer título de su historia, tras quedar el año pasado subcampeón del Top 14, torneo en el que este curso marcha segundo. Pero enfrente tendrá a un clásico como Northampton Saints, fundado por un reverendo allá por 1880 para que sus parroquianos más jóvenes llevaran una vida ordenada.
Vigente campeón de la Premier, el equipo de Franklin Garden’s no está completando una buena temporada en el torneo doméstico pero sí en Europa, donde ha accedido a la final tras apear a Clermont, Castres y Leinster en sucesivas eliminatorias. En su plantel destacan nombres como el apertura Finn Smith o el utility back Tommy Freeman, pero este curso ha sido el de la eclosión de Henry Pollock.
A sus 20 años, cumplidos en enero, el flanker nacido en Banbury ha necesitado solo unos pocos meses para hacerse un hueco en la élite. Tras su cinta negra, su pelo rubio y su cara de niño se esconde un joven con pocos complejos y un punto de arrogancia. «Supongo que es parte del juego. No le vas a caer bien a todo el mundo. Si quieren odiarme, pueden. Si quieren amarme, pueden. No me preocupa demasiado», ha declarado esta semana a los medios.
Seleccionado para los Lions
Antes de arrancar la temporada 2024-2025 solo había disputado un partido con el primer equipo de los Saints, pero en los últimos doce meses ha ganado el Mundial sub-20, ha sido internacional con Inglaterra en el Seis Naciones –marcó dos ensayos a Gales– y ha sido seleccionado para la gira de los British & Irish Lions por tierras australianas. «El talento no tiene edad», sentenció el técnico de este combinado, Andy Farrell, sobre el jugador más joven de su lista.
A la espera de la final, Pollock es el delantero que más ensayos ha marcado (siete), más placajes ha realizado (96) y más pérdidas de balón ha forzado (18) en la máxima competición continental.
Nada parece intimidarlo, ni la presión ni su vertiginoso ascenso. «Siempre digo que el siguiente paso, el siguiente partido, es lo más importante. Nunca me dejo llevar por el ajetreo del fin de semana pasado ni por nada del mundo. Siempre intento ser mejor al día siguiente», defiende.
«Quiero hacer crecer este deporte y hacerlo lo más grande posible», remarca este apasionado de los deportes de combate, que disfruta jugando al golf con sus amigos. No falta quien ya lo compara con el icónico tercera del los All Black Richie McCaw, aunque eso son palabras mayores. El tiempo dirá dónde tiene su techo.