El mejor escenario para el punto de inflexión

San Mamés abrirá las puertas a la Liga F el domingo por segunda vez esta temporada. Y en el Athletic se cruzan los dedos para que la experiencia sea muy diferente a la anterior, cuando el Barcelona pasó por encima de las rojiblancas. Se cruzan los dedos y se confía: el equipo de Javi Lerga rescató un empatee la semana pasada en su visita al Atlético de Madrid en su mejor actuación del curso y las vizcainas están seguras de poder dar un paso más ahora y convertir ese punto en el de inflexión, celebrando su primera victoria de la temporada. En la Catedral y ante el Real Madrid, casi nada.

Lo espera con especial ilusión Eider Arana, que estrena dorsal del primer equipo tras sus dos temporadas cedidas en el Eibar y que en Alcalá debutó por fin como leona tras cinco jornadas en el banquillo. «Contra el Barcelona no llegué a jugar pero sí estuve convocada y por lo menos el césped ya pude pisarlo –sonríe–. Ojalá que este domingo pueda tener la oportunidad de aunque sea participar un poco y ayudar al equipo. Llevo desde muy pequeñita viniendo y ser ahora yo la que puede estar jugando en San Mamés es increíble», ha asegurado la lateral en el encuentro con los medios organizado por el club en el estadio bilbaino.

Lo cierto es que el debut de Arana coincidió no ya con el mejor partido del equipo, sino con el único en el que se ha visto a un Athletic reconocible en el pobre arranque de temporada que está protagonizando. «Estuvimos más cerca de ese Athletic que queremos ser, que queremos ver. Ha sido un pequeño punto de inflexión, de ser conscientes de que somos capaces de hacerlo. Y contra todo un Atlético de Madrid, que no es fácil».

Igualmente aliviada y más crítica con el rendimiento del equipo en las primeras jornadas se ha mostrado Adriana Nanclares. «Parecíamos otro equipo y es importante que volvamos a coger las sensacines. Para mi hemos sido un equipo irreconocible –asegura–, no estábamos demostrando todo lo que habíamos hecho estos años atrás y creo que era cosa de mirarnos hacia dentro y decirnos 'chicas, si esto lo hemos sacado anteriormente, tenemos que hacer autocrítica individualmente y saber que con lo que estamos haciendo no nos está sirviendo'. Creo que el del otro día fue un buen punto de inflexión, de saber que si jugamos como en ese partido, llegarán los buenos resultados y las victorias». Aunque reconoce que una pretemporada anómala por la gran cantidad de lesionadas y la poca costumbre de este equipo a verse en posiciones bajas no han ayudado, Nanclares no ha querido buscar ninguna excusa. «Te ves un partido que no ganas, otro que sacas un empate casi casi sin merecerlo… Y las sensaciones no eran buenas. Creo que teníamos claro que el problema estaba dentro, que somos prácticamente las mismas del año pasado y éramos conscientes de que con lo que estánamos haciendo, no nos valía. Y no queremos que sea una temporada de paso. Si el año pasado hemos competido para ser cuartas, este año por qué no vamos a pelearlo».

Asegura la guardameta que «lo importante no es cómo empieza sino cómo acaba pero nos venía bien ya este empujón y cambio de chip», que ahora espera hacer definitivo contra el Real Madrid. El equipo madrileño también está firmando un inicio de Liga por debajo de las expectativas y además llegará a Bilbo solo cuatro días después de disputar esta noche el primer partido de la fase Liga de la Champions League frente a la Roma. Nanclares confía en que todo eso se note pero sobre todo subraya la importancia de que «nosotras lo hagamos bien, que sigamos la línea que marcamos el otro día, que recuperemos definitivamente la esencia de este equipo».

Sobre todo porque, con el equipo solo un punto por encima del descenso y a nueve ya de la tercera plaza, el empate contra el Atlético servirá de poco si no se le da continuidad de inmediato. «No sirve si en estos dos partidos hasta el parón no sacamos nada. Pero creo que el equipo está con alegría, con ilusión y confío en que el domingo podamos, como mínimo, puntuar y mejor si son los tres puntos. Y luego el Alhama será un partido para sacarlo todo, como si no hubiera un mañana, e irnos al parón de otra manera, con la sensación de que efectivamente se ha producido el cambio».

Aunque la última experiencia en San Mamés fuese muy dura, la portera mirandesa cree que jugar en la Catedral beneficiará al equipo en este nuevo camino que espera estar andando. «Siempre es especial. Una oportunidad para crecer y aprender y un estímulo diferente que nos ayuda. Sobre todo vernos con toda la afición es importante, para mí es superespecial cada vez que nos dicen que vamos a jugar aquí».

Todo se junta, en opinión de Eider Arana, para dar el salto. «No nos podemos quedar en lo que podíamos haber hecho sino en lo que tenemos que hacer en adelante y el partido del otro día nos dirige hacia el camino que queremos ir –asegura–. Ahora tenemos un partido especial para intentar dar un paso aún más importante. En San Mamés, que ya es algo muy motivante y contra todo un Real Madrid. Ojalá se anime mucha gente a venir, a ayudarnos, y nosotras a salir a muerte, a intentar ser ese equipo con adn Athletic. Vamos a ir a por ellas. Por la afición, por el escenario, por el rival y por la necesidad y las ganas que tenemos de ganar».

Grada de animación

Se espera una buena entrada en la Catedral, más aún después de la iniciativa de la Diputación Foral de Bizkaia y el Athletic que han presentado este mediodía sobre el mismo césped del estadio la Diputada de Euskera, Cultura y Deporte Lexuri Arrizabalaga y la vicepresidenta rojiblanca Nerea Ortiz.

Y es que el programa «Pasa baloia, neska», impulsado hace tres años por las dos entidades junto a la Federación de Bizkaia, y por extensión el fútbol base femenino tendrá protagonismo en el encuentro del domingo. Y en todos los que dispute el Athletic femenino en San Mamés de ahora en adelante, que contarán con una grada de animación específica para las aproximadamente 1.500 futbolistas de los 51 equipos que participan en el programa. Una manera de apoyar al equipo, de acercar a las futbolistas más jóvenes a sus referentes y, a mismo tiempo, de dar a éstas su protagonismo dentro de la familia rojiblanca, tal y como han destacado en la presentación Arrizabala y Ortiz.

Una iniciativa que ha sido aplaudida por las propias leonas. «Con 10-12 años me habría encantado estar en esa grada animando –aseguraba Adriana Nanclares–. Tener la posibilidad de que las niñas puedan hacerlo es algo muy boninto, para ellas y para nosotras, sobre todo si tiene continuidad».