El ajuste supone la retirada de cinco autobuses en días laborables y festivos y de 2,5 vehículos los sábados, lo que conlleva un aumento del tiempo de espera en seis de las líneas afectadas, que se concentrarán en sábados y festivos.
Las frecuencias bajan desde este lunes en las líneas Deusto-Atxuri, San Ignacio-Txurdinaga, Santutxu-Plaza Circular, Santutxu-Lezeaga, Larraskitu-Castaños, y Artatzu-Moyua, además de la línea que cubre el trayecto entre San Inazio y Zorrotza, aunque en este caso se cortará el recorrido, al girar hacia Moyua, en vez de seguir hacia Zabalburu.
El ajuste ha sido acordado con la empresa concesionaria del servicio, Alsa, y con el comité de empresa de Bilbobus y supondrá la no renovación de ocho contratos temporales. Tal y como publicó GARA el pasado 15 de enero, ELA y LAB se han venido oponiendo a las pretensiones del comité de empresa, en el que UGT y CCOO son mayoritarios.
Además, están previstos nuevos recortes que llegarán en 2014 a las líneas Sarrikue-Atxuri, donde la espera pasará de 15 a 20 minutos, y en la línea 62, que irá de Atxuri a Sagrado Corazón, en lugar de llegar hasta Termibus.
A los recortes en Bilbobus, se suma la reducción por primera vez de servicios en Metro Bilbao y el consiguiente aumento del tiempo de espera en el suburbano, muy contestado por los sindicatos.