Agustín GOIKOETXEA

Ane Muguruza pide que se depuren las responsabilidades políticas en los crímenes de Estado

El homenaje de Egiari Zor a los militantes de la izquierda abertzale Santi Brouard y Josu Muguruza, en el 35º y 30º aniversario de que fueran abatidos por balas mercenarias, se ha extendido al conjunto de las víctimas de las violencias del Estado. Ane Muguruza ha pedido que se depuren las responsabilidades políticas que las hicieron posible.

Ane Muguruza, de Egiari Zor Fundazioa, ha intervenido en la plaza de Errekalde. (Luis JAUREGIALTZO | FOKU)
Ane Muguruza, de Egiari Zor Fundazioa, ha intervenido en la plaza de Errekalde. (Luis JAUREGIALTZO | FOKU)

Ametzola y Errekalde han sido escenarios de actos de recuerdo al reconocido pediatra y presidente de Hasi, así como al periodista y diputado electo de Herri Batasuna, víctimas de sendos atentados en Bilbo y Madrid en 1984 y 1989, respectivamente.

En ellos han participado militantes de la izquierda abertzale que compartieron vivencias con los fallecidos, junto al secretario general de Sortu, Arkaitz Rodríguez, familiares, cargos públicos de EH Bildu y Elkarrekin Podemos. Un año más ha acudido Monika Hernando, directora de Víctimas y Derechos Humanos del Ejecutivo de Lakua, acompañada de Aintzane Ezenarro, directora de Gogora.

«No fue casualidad»

En el monolito erigido en memoria de Brouard se ha bailado un agurra y se ha realizado una ofrenda floral, que se ha repetido en la plaza de Errekalde, donde ha tomado la palabra Ane Muguruza, en nombre de Egiari Zor Fundazioa. «La fecha elegida para asesinar a ambos políticos abertzales no la determinó el azar. No fue casualidad», ha enfatizado al inicio de su intervención.

«El proyecto político que ambos, como tantos y tantas otras, defendían para Euskal Herria, el sistema político, económico y social que querían para su pueblo, por el que luchaban era aquel que a día de hoy aún continúa chocando frontalmente con lo que dejó atado y bien atado el genocida», ha expuesto. «La impunidad y la violencia son los pilares sobre los que se asienta la democracia española», ha añadido.

Durante 40 años, según datos de la propia fundación, 78 personas perdieron la vida por la violencia del Estado de los que solo 43 han sido reconocidos años después. «Se habla mucho de memoria, de la necesidad de construir una memoria democrática que deslegitime la violencia sin excusas. Pero parece –se ha quejado Muguruza– que solo existe una violencia que deslegitimar, y no, precisamente, la que mantiene a miles de personas fusiladas en anónimas cunetas; tampoco la que se financió con fondos reservados, ni la que disparaba para disolver manifestaciones o asambleas».

«¿Es que, acaso, las víctimas de la violencia del Estado carecemos de razones para sentirnos humilladas por actuaciones y omisiones de terceros», ha interpelado. Ha citado actos de exaltación a Franco pero también a políticos del PSOE condenados por su relación con el GAL, entre otros.

Ha denunciado que no se haga autocrítica en los aparatos estatales por la sistemática violación de los derechos humanos, desde la muerte de Iñigo Cabacas a las víctimas del caso Almería, sin olvidar a las que ha causado la política carcelaria, con mención especial a José Ángel Otxoa de Eribe.

«Nos quieren evitar»

«Nos quieren evitar. Nos evitan a todas y a todos los que englosamos la trágica lista de las víctimas de las violencias del Estado. Nos evitan de manera consciente, para no tener que confrontar con su hipocresía –ha destacado–, la de exigir lo que ellos mismos se niegan a asumir». Para Egiari Zor, se trata de reforzar el discurso legitimador de la violencia estatal.

Muguruza ha manifestado que no es suficiente con reconocer que efectivamente existen víctimas de distintas violencias. «Es necesario que se depuren las responsabilidades políticas, reflexionar sobre las circunstancias que han hecho posible todos los crímenes practicados por el Estado y se visibilice su impunidad».

Ha insistido en la legitimidad que poseen por ser víctimas de la violencia. «Podemos afirmar que nadie de los que aqui estamos tiene ningún problema con los que piensan diferente. Pero no vamos a aceptar –ha advertido– que quieren aspiran a imponernos su versión de la historia como si fuera única, que quienes son reacios a asumir su parte de responsabilidad en el conflicto y sus consecuencias, traten de darnos lecciones de moralidad».

Manifestación en las calles de Bilbo

Esta tarde Sortu ha reivindicado la memoria de Muguruza y Brouard en las calles de Bilbo. «El asesinato de Santi y Josu no fue casual. Fueron asesinados porque la izquierda aberzale optó por luchar contra el régimen postfranquista. Santi y Josu fueron asesinados, como lo fueron otros tantos camaradas, por su apuesta con la ruptura democrática con ese régimen», ha señalado el secretario general, Arkaitz Rodríguez.

Y ha destacado que el análisis realizado por la izquierda abertzale en aquella época es compartido ahora por otras fuerzas políticas: «La izquierda abertzale no es ya el único agente político que plantea una ruptura democrática. Hoy, todas las fuerzas políticas soberanistas de otras naciones del Estado también comparten la tesis de la ruptura democrática, como demuestra las declaración de la Llotja de Mar».

«Hoy somos más los que pensamos que la única posibilidad de acceder a un escenario de democracia y justicia es a través de la profundización de la ruptura democrática con el Régimen del 78, ejercer el derecho de autodeterminación y construir una república, aquí, en Euskal Herria, pero también en el resto del Estado», ha manifestado.