Jon Anderson, Rick Wakeman, Steve Howe, Bill Bruford y Chris Squire lograron su conjunción cósmica perfecta con ‘Close to the Edge’, una joya del rock progresivo que tuvo su prólogo un año antes, cuando en 1971, publicaron el álbum ‘Fragile’.

Este proyecto supuso una declaración de intenciones abierta a los múltiples talentos musicales y compositivos que tenían los cinco músicos y fruto de ello fueron los cortes ‘Roundabout’, ‘Long Distance Runaround’, ‘South Side Of The Sky’ y ‘Heart Of The Sunrise’.

El gran éxito que cosechó ‘Fragile’ amplificó los territorios creativos de este quinteto de virtuosos que, en el 72, dieron forma al que sería su mejor trabajo y su propio epitafio como Yes, ‘Close to the Edge’. Inspirado en la obra del escritor alemán y premio Nobel Hermann Hesse, y contando con el refuerzo artístico del por entonces joven arquitecto y diseñador británico Roger Dean, el disco se dividió en tres temas que pasarían a convertirse en piezas claves del fenómeno del rock británico de los 70 y en temas fundamentales de su repertorio.

La pieza homónima de 20 minutos de duración, dividida en cuatro secciones, el muy sensible single ‘And You And I’ y ‘Siberian Khatru’ conforman la estructura sonora de unas obra fuertemente inspirada en la novela alegórica que Hermann Hesse publicó en 1922, ‘Siddartha’.

La ruta de Siddartha

El disco sigue los pasajes escritos de su protagonista, Brahmin Siddartha de los 18 a los 60 años, y en su ruta iniciática salen a relucir el contraste entre el mundo espiritual y el material, y la idea de que la unidad de todas las cosas es experimentada en un espacio eterno.

La novela también se divide en tres partes, en las cuales Siddartha experimenta la vida del asceta, la del mundo material y sensual y el iluminamiento por el río, que actúa como símbolo de eternidad a lo largo de la novela, y es la imagen central alrededor del cual se desarrolla la historia.

La diversidad sonora de ‘Close to the Edge’ se asoma desde su primer tema, prologado por cantos de pájaros, cascadas y campanas de viento, en su primera parte (‘The Solid Time of Change') emergen los talentos iniciales del guitarrista Steve Howe y los teclados de Rick Wakeman. No tarda en unirse a este duelo el bajo de Chris Square y la voz de Jon Anderson que nos invita a ser partícipes de este viaje, mientras canta «una hechicera podría llamarte desde las profundidades de tu desgracia».

Compleja, llena de obstáculos y constantes saltos rítmicos que invitan a ser visitados desde la imaginación, ‘Close to the Edge’ determinó el final de un quinteto que recordó que debían trasladarse al estudio de grabación para retomar las grabaciones que siempre dejaban en puntos suspensivos y que, personalmente, llevó a cada uno de sus cinco integrantes a dar lo mejor de sí.

El ingeniero de sonido Eddie Offord recordó que, al igual que para el resto de la banda, ‘Close to the Edge’ fue una tortuosa travesía que se transformó en una obra maestra.