La formación jeltzale subraya que todos estos casos tienen en común «un claro sesgo e inspiración políticas» en que los encausados « resultaban acusados de militancia o colaboración con ETA, bajo el único argumento de la vinculación de sus legales y legítimas actividades culturales, periodísticas o políticas a las órdenes y a las posiciones emanadas de ETA».
El PNV recuerda que todo ello se produjo en un contexto «presidido por la filosofía que llevó al gobierno del PP, con la colaboración del PSOE, a articular la Ley de Partidos y los subsiguientes procesos de ilegalización». A su parecer, la historia «se repite» a pesar de que este juicio « se va a desarrollar en un contexto absolutamente distinto».
«Estas razones determinan que el inicio de este proceso judicial sea un factor regresivo, un elemento perturbador en estos momentos en los que la sociedad vasca camina en la senda de la normalización política. Ello, con independencia de la total falta de fundamento de las imputaciones penales, como así se acredita en el manifiesto que círculos de letrados han suscrito al respecto», añade la nota.
Por ello, el PNV expresa «su absoluto rechazo» al juicio por el sumario 35/02 y opina que «debe culminar inmediatamente con la declaración judicial de absolución de todos los encausados», una decisión que de producirse «no solamente ayudará a la recuperación de la autoridad y a la reintegración del prestigio de la justicia penal sino que, adicionalmente, coadyuvará al avance del proceso de paz y de normalización política de Euskadi».