Los participantes han coreado lemas en defensa de su empleo y han mostrado su preocupación ante un futuro que se presenta cuando menos incierto. Unas horas antes se han concentrado en Azpeitia trabajadores de Grumal, filial de Fagor que ayer vio cómo se solicitaba su concurso de acreedores.

El presidente del comité de empresa, Patxi Isasmendi, ha asegurado que esta firma de muebles de cocina es viable y «tiene futuro. ¿Por qué no se dignan a hacer una reunión con el comité para explicarnos de una vez qué es lo que van a hacer con los 148 trabajadores de Grumal?«, se ha preguntado.

El representante de los empleados ha tachado de «escándalo» la propuesta de plan de viabilidad para salvar 48 puestos de trabajo, al tiempo que ha criticado que los responsables de Fagor «no se dignan a decir qué podría pasar» con el centenar de personas restante.

También han recordado que, tras la compra de Grumal por parte de Fagor Electrodomésticos, se firmó un compromiso de convertir la empresa en cooperativa para 2010, con lo que sus empleados ahora tendrían «los mismos derechos y obligaciones que el resto de socios de Fagor. Creemos que la compañía tiene futuro, porque además es notable que dentro de Fagor Electrodomésticos la única empresa en activo en estos momentos es Grumal».