La cita es a las 16.30 de hoy en la sede de Kutxa de la calle Garibai de Donostia, donde los catorce miembros del Consejo de Administración analizarán las dos propuestas que hay sobre la mesa para que Kutxa se transforme en fundación: la de la Diputación de Gipuzkoa, que plantea crear una fundación ordinaria a través de la cesión de acciones a las instituciones del territorio, y la impulsada por PNV, PSE y PP, que defiende una fundación bancaria privada sin control de las entidades públicas.
Los consejeros deberán decidir si estas dos propuestas son trasladadas a la asamblea de octubre o si solo se da cauce a una de ellas. Los siete consejeros de la izquierda abertzale apoyarán la propuesta de la Diputación, mientras los cinco de PNV, PSE defenderán la opción de la fundación privada, tal y como lo hicieron el 30 de junio en BBK y Vital. Tampoco se espera que Pixkanaka se posicione en contra, ya que uno de sus miembros, Borja García, será precisamente quien represente a los trabajadores en el nuevo patronato. Por ello, la única posibilidad que existe para que la propuesta foral sea tratada por la asamblea es que el representante de CCOO no vote en contra de ello, de tal forma que el voto de calidad del presidente no sería suficiente para vetarlo.
Antes incluso de conocerse el resultado de esta votación, en el orden del día de hoy ya se han incluido varios puntos relacionados con el proceso de transformación en fundación bancaria, como son la dotación inicial, que será de 30.000 euros, los estatutos y la designación de los miembros del patronato, propuesta realizada por los grupos junteros de PNV, PSE y PP.
Según los estatutos de la futura fundación bancaria, la duración del mandato de los patronos será de cuatro años, aunque podrán ejercer el cargo durante otros cuatro. Además, hay que tener en cuenta que será el propio patronato el que designe sucesivamente a los nuevos miembros a través del régimen de cooptación, un hecho que ha sido denunciado desde distintos sectores como un intento de imponer una «élite de confianza« por parte de PNV, PSE y PP.
Otra de las denuncias hace referencia a la puesta en marcha del proceso de nombramiento de patronos sin antes haberse aprobado los estatutos, aspectos ambos que serán tratados en una misma reunión.
Movilización hoy en Donostia
Ante la reunión del Consejo de Administración, y para denunciar «el expolio que se está a punto de cometer contra la sociedad guipuzcoana», la plataforma contra la privatización de las cajas, integrada por sindicatos y movimientos sociales, ha convocado una cadena humana que partirá hoy a las 11 desde el Ayuntamiento de Donostia, para finalizar en la sede de Kutxa de Garibai. Diversas asociaciones, como la organización juvenil Ernai, han hecho un llamamiento a acudir a esta protesta.
Según subrayan los convocantes, «hay tiempo, hay alternativas y solo falta voluntad política para que Kutxabank sea una institución financiera pública en beneficio de las personas y el tejido productivo vasco y no en beneficio de accionistas especuladores».
PNV, PSE y PP eluden en las Juntas de Gipuzkoa el debate sobre la privatización de las cajas
Los tres partidos que gestionan la privatización de las cajas y de Kutxabank impidieron ayer con sus votos la posibilidad de crear en la Juntas Generales de Gipuzkoa una ponencia que debata sobre la conversión de Kutxa en fundación bancaria. Los ocho votos que PNV, PSE y PP suman en las comisiones tumbaron ayer la propuesta de EH Bildu para que se cree una ponencia en esta institución que debata sobre la transformación de Kutxa.
Previamente, el diputado general, Martín Garitano, explicó a los grupos los detalles de la propuesta que la Diputación ha elaborado, apoyada en un informe jurídico, que consiste en optar por hacer de Kutxa una fundación ordinaria, no bancaria, para lo cual esta entidad cedería sus acciones a la institución foral y los ayuntamientos.
Para detallar la propuesta participó en la comisión el abogado Xabier Barinagarrementeria, miembro del equipo responsable del informe jurídico, quien afirmó que la Ley de Cajas y Fundaciones da de plazo hasta el 29 de diciembre para que las cajas se conviertan en fundaciones, bien bancarias -sin control público-, bien ordinarias -controladas desde las instituciones-. Si las acciones de Kutxa en Kutxabank superan el 5% (el mínimo para tener un miembro en el consejo de administración) deberá convertirse en bancaria, pero si no llegan a esa cantidad podrá ser una fundación ordinaria y mantenerse el control público sobre ella.
A los calificativos de «tinglado jurídico» o «triquiñuela legal» utilizados por la oposición, el jurista respondió que la propuesta es «absolutamente» legal y que cumple la nueva ley al optar por una de las dos opciones que ofrece la propia norma, que fue pactada por PP y PNV.
Además, según trascendió en la reunión que Garitano mantuvo el lunes con el presidente de Kutxa, Xabier Iturbe, este último reconoció la legalidad de la propuesta foral, tal y como lo recoge el informe encargado por Kutxa a la consultora PwC (PricewaterHouse), la misma que ha elaborado los estatutos de la futura fundación.
En cuanto a las dudas sobre la rentabilidad económica de la entidad en caso de optar por ser fundación ordinaria que expresaron desde la oposición, Garitano respondió que son «las mismas que ofrece la fundación bancaria, porque ambas están a merced de que las decisiones que se tomen sean acertadas o no, solo que en un caso serán adoptadas mirando el interés público y en otro, pensando en el interés privado». Iñaki TELLERIA
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