En el marco del segundo día de huelga indefinida convocada en el servicio público de transporte por los sindicatos UGT, ELA, CCOO, LAB y LSB/USO, tras otras nueve jornadas de paro en defensa del mantenimiento del empleo en Bizkaibus, la Diputación de Bizkaia y la parte sindical se han cruzado reproches y acusaciones mutuas de mentir y ser responsables del conflicto.

Después de que los trabajadores hubiesen pedido en manifestación y a gritos ante el palacio foral en Bilbo la dimisión de Garamendi, la diputada ha acusado a los sindicatos, en conferencia de prensa, de mantener una huelga de «manera injusta e injustificable».

Garamendi ha pedido disculpas a los ciudadanos y ha afirmado que «la huelga perjudica a empresas, trabajadores, usuarios y responsables del servicio».

Ha dicho que está generando pérdidas en las empresas superiores al millón de euros y ha evidenciado que el 70% de los 79 millones de euros destinados a Bizkaibus en el último año correspondió a gastos de personal.

A su juicio, «no estamos ante una huelga por razones laborales» ya que no se habla «de salarios, jornadas de trabajo ni pagas extra» y tampoco «nadie va a perder su puesto de trabajo ni a empeorar sus condiciones laborales».

«Prefiero pensar -ha dicho- que no se trata de una batalla por el poder» entre sindicatos, en un contexto en el que en los próximos meses deberán renovarse los comités de empresa en las compañías que se encargarán de las nuevas concesiones de líneas en Bizkaibus.

Garamendi ha afirmado que el conflicto parte de «tres mentiras extendidas por los sindicatos», en referencia a que la Diputación incumple el acuerdo que suscribió hace un año sobre mantenimiento del empleo en el servicio, va a echar a trabajadores y va a ofrecer un servicio de menor calidad, lo cual «no es cierto».

La diputada ha reiterado que ningún trabajador de Bizkaibus va a perder su empleo y ha afirmado que también es «mentira» que la Diputación «no quiere dialogar», aunque ha insistido en pedir «un gesto» a los sindicatos para negociar: «Hoy mismo -ha afirmado-, si desconvocan parcialmente la huelga».

Sindicatos acusan a la Diputación de «cerrazón»

Los sindicatos, por su parte, han ofrecido previamente otra conferencia de prensa ante el palacio foral acompañados de los trabajadores de Bizkaibus en huelga, algunos de ellos con carteles en los que se leía ‘Yo no pago Bizkaibus’.

Los representantes sindicales han afirmado que entenderían que parte de la sociedad «se llegue a plantear el no pagar el autobús» por el «empeoramiento del servicio que plantea» la Diputación con el recorte de servicios.

Los sindicatos han sostenido que el conflicto ha sido creado por la Diputación y han solicitado a los ciudadanos que se sumen a las manifestaciones que prevén celebrar en los próximos días.

Han acusado a la Diputación de «cerrazón» y se han preguntado que si la institución «no está cumpliendo lo acordado hace un año» sobre mantenimiento del empleo en el servicio «qué nos dice que van a respetarlo dentro de año y medio», en marzo de 2016, cuando plantea la implementación de nuevas líneas.