Tres mujeres del colectivo Femen han realizado una protesta frente al Tribunal Correccional de Lille cuando Dominique Strauss-Khan ha acudido a declarar por el juicio abierto contra él y otras 13 personas por «proxenetismo agravado».

Las mujeres han tratado de abalanzarse sobre el coche del ex director gerente de FMI, con mensajes escritos en su cuerpo y reclamando la culpabilidad de los clientes de las trabajadoras sexuales.

Strauss-Khan debe declarar durante tres días esta semana sobre las acusaciones que figuran en el sumario. Su línea de defensa es negar la versión de las mujeres, que consituidas en acusación particular, aseguraron que el ex director del FMI «conocía perfectamente» que se trataba de trabajadoras sexuales.

En sus primeras palabras al tribunal la semana pasada, Strauss-Khan afirmó que no conocía a otros dos de los acusados que se sientan con él en el banquillo, uno de ellos un proxeneta conocido en Bélgica, y el que fuera responsable de comunicación del Carlton de Lille, René Kojfer.

De acuerdo con el acta de acusación, ambos participaron en el montaje de una red de trabajadoras sexuales al servicio del entonces director del FMI. El cargo al que se enfrenta Strauss-Khan, proxenetismo agravado, podría suponer una condena de hasta diez años de cárcel y una multa de 1,5 millones de euros.