GARA
WASHINGTON

Ola de críticas a la idea de Trump de prohibir entrar en EEUU a musulmanes

Las críticas a la idea del aspirante presidencial republicano, Donald Trump, de prohibir la entrada a EEUU a los musulmanes, idea en la que insiste, fueron generalizadas, también en las filas republicanas. Para la Casa Blanca, le «descalifica» para ejercer la Presidencia.

No es la primera vez que el magnate Donald Trump se ampara en principios excéntricos para remover los sentimientos nacionalistas. Cuando lanzó su campaña como aspirante a obtener la candidatura republicana a la Casa Blanca, el 16 de junio, acusó a los migrantes mexicanos de llevar el crimen a EEUU y todavía hoy insiste en su propuesta de levantar un «gran muro» en la frontera sur. Pero el precandidato republicano ha suscitado en las últimas horas un aluvión de críticas indignadas tanto en su país como en el exterior con su propuesta de prohibir la entrada en EEUU a los musulmanes, un plan en el que insistió ayer y que fue censurado por el propio Partido Republicano, que aseguró que esa idea no le representa, y que además de ser «ofensiva y extravagante» puede poner en riesgo a las tropas estadounidenses en países musulmanes. También los precandidatos demócratas criticaron a Trump, que llegó a ser tildado de «fascista demagogo». Para la Casa Blanca, esa propuesta «profundamente tóxica» y contraria a los valores de EEUU le «descalifica» para ejercer la Presidencia.

La propia ONU, que evita habitualmente comentar las palabras de los candidatos electorales, expresó su preocupación por el mensaje lanzado por Trump al calor de las repercusiones por la matanza de la semana pasada en San Bernardino. «No creemos que nadie deba seguir retóricas que se basen en la islamofobia, la xenofobia o cualquier otro llamamiento al odio de algún grupo», señaló.

Fuera de EEUU, Londres y París coincidieron en su desacuerdo por considerar que es una propuesta que «divide» y «alimenta el odio y la confusión».

La propuesta de Trump, que justificó afirmando que muchos musulmanes apoyan la yihad violenta contra los estadounidenses y prefieren regirse por la sharia y no por la Constitución de EEUU, no precisa si la medida incluye a inmigrantes, turistas y musulmanes con nacionalidad estadounidense, y tampoco establece un marco técnico y jurídico para llevarla a cabo. SU plan incluye puntos que, según expertos legales, están en contra de la Constitución, específicamente en contra de las enmiendas que garantizan la libertad de culto y el debido proceso, y desde la Casa Blanca se le recordó que lo primero que hace un presidente de EEUU al asumir el cargo es jurar lealtad y respeto a la Carta Magna.

Ayer mismo, el magnate reiteró su propuesta y volvió a poner como ejemplo los campos de concentración para japoneses instalados por el presidente Franklin Roosevelt durante la II Guerra Mundial. Roosevelt, «uno de los más respetados presidentes» del país, «hizo algo peor», afirmó Trump, quien dijo que su plan sería temporal.

Pero por muchas polémicas que suscite, Trump sigue liderando las encuestas del lado republicano. El lunes, coincidiendo con su controvertido anuncio, un nuevo sondeo de CNN lo colocaba a la cabeza en Iowa, que votará en la primera de las primarias, el 1 de febrero de 2016.