Svetislav Pesic ha salido con todo –con la salvedad de dejarse a Heurtel y Hanga para la segunda unidad– mientras que Porfi Fisac se ha dejado a Seibutis en el banquillo en el quinteto inicial, buscando salir con Jonathan Barreiro para paliar la ingente cantidad de centímetros que hace gala el bando culé. Los blaugrana han saltado sobre aviso de cómo las gasta el cuadro maño, así como dispuesto a emular la paliza que el Real Madrid le metió la víspera a Valencia Basket. Y vaya si lo ha emulado, al punto de que ha borrado del mapa a un rival que ha tardado demasiado poco en reconocer que este primer partido no iba a ser el de la campanada. A tal punto, que los 20 minutos posteriores al descanso han sobrado por completo y ha encajado la cuarta mayor paliza de la historia de la Liga ACB en los play-offs.

Y después de un breve tanteo, el Barça se ha escapado a golpe de triple, con un Víctor Claver trasfigurado en Larry Bird –el alero valenciano ha llegado a firmar un 10 de 10 en triples, después de clavar sus dos primeros intentos lejanos–, al tiempo que Okoye ha repetido la misma mala serie lanzadora que hiciera gala en el segundo partido de cuartos ante el Baskonia. Total, que Porfi Fisac se ha visto empujado a pedir tiempo con un 13-4 en el luminoso.

Como quien oye llover. El primer cuarto ha terminado con 26-14, y gracias, porque el triple postrero de Hanga ha salido de la mano del magiar fuera de tiempo. Y por si lo visto en el primer asalto ha sabido a poco, Kyle Kuric ha asomado en el arranque del segundo cuarto para, a golpe de tiro exterior, masacrar a un Tecnyconta Zaragoza que ya para entonces ha decidido bajar los brazos.

El único conato reactivo de los de Fisac ha llegado después de un «duelo de carneros» entre Radovic y Oriola. Cinco puntos seguidos de los maños han tenido cumplida respuesta con un tiempo muerto de Svetislav Pesic, como si tuviera algo de lo que preocuparse con un 46-24 en el luminoso, mientras que en la grada del Palau Blaugrana se ha llegado a aprovechar algún parón para clamar –bien alto y bien claro– por la independencia de Catalunya y la libertad de los presos políticos. Y después de la reivindicación, la exhibición, porque los blaugrana han alcanzado los vestuarios con un incontestable 51-26 en el marcador.

Kyle Kuric sin piedad

Como era de prever, nada ha cambiado en la película del partido tras el paso por los vestuarios; si acaso, que los de Fisac han dejado de abusar de los triples y que han empezado a racionalizar los minutos, dando paso a las profundidades de su banquillo. La lesión, en apariencia leve, de McCalebb en los isquiotibiales ha ayudado desde luego en las intenciones del entrenador aragonés.

Ni por esas se ha relajado el bando culé, sobre todo un Kyle Kuric desatado que ha anotado 25 puntos en 19 minutos en la cancha. Hasta el último cuarto, los de Pesic han ido doblando sucesivamente en el marcador a un Tecnyconta Zaragoza que ha tenido que afrontar el cuarto final con 75-37 en el luminoso.

Y por si alguien se creyera que el Barça se iba a relajar en los diez minutos finales, pues se equivoca. No al menos Kyle Kuric, Smits y Blazic, que han reclamado su oportunidad, al tiempo que los de Fisac han preferido dejar pasar el tiempo y que el 101-59 final sea ya historia, porque a fin de cuentas, su semifinal solo va 1-0, aunque parezca que ya está sentenciada.