A las 9.00 de la mañana, la primera hora operativa después del fin del estado de alarma en las dos comunidades, se han reunido en Kobaron Urkullu y Revilla para, ante un montón de cámaras, escenificar que se recupera la movilidad entre ambos territorios. Mirado desde la CAV, no ocurre lo mismo con Nafarroa ni con Ipar Euskal Herria, donde habrá que esperar hasta domingo y lunes. Tampoco con La Rioja. En un gesto de difícil interpretación política, el lehendakari ha decidido dar realce a este paso mínimo, tanto en lo temporal como en lo geográfico.

Los dos han comparecido con mascarilla y se han saludado con el codo, como imponen las medidas de seguridad. Su mensaje conjunto asume esta contradicción: los dos quieren reflejar que son seguros ya pero al mismo tiempo instan a tomar todas las medidas de protección en un fin de semana que puede ser de circulación masiva, sobre todo desde Bizkaia a Cantabria.

Como detalle significativo, la Ertzaintza ha adelantado que colocará hoy mismo en el tramo limítrofe entre los dos territorios una grúa, preparada para que si se producen accidentes o elementos que dificulten el tráfico, los vehículos puedan retirarse con premura.

Otra señal del sinsentido de este «efecto llamada» de fin de semana y en dirección única lo ha dado la consejera de Salud, Nekane Murga, al exponer en Onda Vasca que «realmente no es necesario que todo el mundo que quiera ir a Cantabria vaya hoy».

Estos mensajes no han tenido gran efecto aparentemente, porque apenas media hora después del acto se han confirmado las primeras retenciones importantes en la zona, especialmente entre Colindres y Laredo en sentido a Santander.

Así, a las 9.30 se constataban colas de hasta siete kilómetros entre ambas localidades. Previsiblemente tras el mediodía se agravará la situación, puesto que los colapsos ya suelen ser habituales los viernes tarde entre Bizkaia y localidades cántabras como Castro, Noja o Laredo.

Agradecimientos y elogios

Los dos presidentes autonómicos han realizado un breve recorrido por la Vía Verde del Paseo de Itsaslur, de Bizkaia, que conecta con la Vía Verde del Piquillo, en Cantabria. Desde allí se puede ver Castro Urdiales y el Superpuerto de Bilbo.

En declaraciones, ha hecho primero Urkullu un agradecimiento a los sanitarios porque «hacen posible que la vida siga adelante y que nosotros podamos gozar de esta vida». E inmediatamente ha apelado a la «toma de conciencia»: «Nada de esto sería posible sin el trabajo anterior y tampoco el trabajo anterior habría servido de nada, si a partir de hoy no guardamos las medidas que son absolutamente recomendadas y necesarias de cumplir por cada uno de nosotros. Por lo tanto, tiene que estar en la conciencia de cada uno de nosotros el hecho de que preservemos todo aquello que ha supuesto un esfuerzo en la etapa anterior».

Por su parte, Revilla se ha extendido en elogios a Urkullu, del que «tengo una extraordinaria opinión desde hace mucho tiempo», ha dicho. Aunque los planteamientos del lehendakari de la CAV no han salido adelante en ninguan de esas citas, como el mismo Urkullu se ha encargado de ir denunciando, el cántabro ha dicho que «esta opinión favorable se ha acrecentado a través de 14 domingos matinales, a una media de cuatro horas y media, que suman 63 horas con Pedro (Sánchez). Hemos compartido los dos (Urkullu y él) los mismos planteamientos y también nuestros partidos en el Parlamento de España».

Desde las redes sociales, Maddalen Iriarte, candidata a lehendakari por EH Bildu, ha recordado tras este evento que las mugas internas de Euskal Herria siguen cerradas y ha preguntado a Urkullu si piensa reunirse en los próximos días también con los mandatarios de Ipar Euskal Herria y Nafarroa, Jean-René Etchegaray y María Chivite.

La apertura de las fronteras con Cantabria es una buena noticia, pero no podemos olvidar que las fronteras internas de nuestro país siguen cerradas. ¿Se encontrará Urkullu los próximos días con los lehendakaris Chivite y Etchegaray?

— Maddalen Iriarte Okiñena (@MaddalenIriarte) June 19, 2020