La plataforma Gernika Memoriaren Lekuko ha comparecido este sábado ante los medios de comunicación para presentar la campaña ‘Guernica Gernikara, herri baten aldarrikapena. Azken Bidaia’ con el objetivo de reclamar que el cuadro de Pablo Picasso sea trasladado a la localidad cuya destrucción lo inspiró.

Tras más de cuatro décadas expuesto en el museo MoMA de Nueva York por expreso deseo del artista, el 9 de setiembre de 1981, el lienzo viajó desde el aeropuerto de Nueva York a Madrid y no se ha movido desde entonces. 

En este sentido, los portavoces de la plataforma formada por Gernika Batzordea, Ipes elkartea, Lobak, Gernika Garretan, Sare Gernika-Lumo y Arrano, Sabin Ibazeta, Maitane Uriarte y Camino Saiz han leído un comunicado para reclamar que es hora de que el ‘Guernica’ llegue a Gernika.

Para ello, han presentado una campaña que contará, de setiembre a noviembre, con exposiciones, jornadas, encuentros de diferentes artistas y la proyección del documental ‘Gernika Batzordea. 1976-2021’. La campaña finalizará además con una manifestación que tendrá lugar el 27 de noviembre, a las 12.00, en Gernika.

Los portavoces de la plataforma han recordado que han pasado cuatro décadas «desde que trajeron nuestro cuadro del otro lado del océano. Digo nuestro cuadro porque refleja el dolor de nuestro pueblo desde las entrañas, e igual que Picasso hizo suyo nuestro dolor, los gernikarras también hacemos nuestro este cuadro que es reflejo de la matanza y de la injusticia».

De este modo, han explicado que el deseo de Picasso era que, tras la Guerra Civil y la dictadura, el cuadro se trasladara al Estado español, pensando que estaría protegido. Sin embargo, según Ibazeta, Uriarte y Saiz, está protegido, pero también «secuestrado».

«La historia que el cuadro tiene detrás, y que se ha utilizado por el mundo para denunciar la injusta malicia de la humanidad, debería, por naturaleza, producir un enorme zumbido en la conciencia de todos. Sin embargo, allí está, en una sala grande y fría del Museo Reina Sofía, sin poder transmitir bien el mensaje a los visitantes que le vienen de lejos», han remarcado.

«De entre los ojos que habían pasado por ella, ¿cuántos habrían visto y comprendido lo que el cuadro tiene detrás? ¿cuántos comprenderían lo que Picasso quería denunciar a la hora de pintar el cuadro?», se han preguntado.

A su juicio, «ho hay mejor lugar» que Gernika para acoger el lienzo y que los que se acerquen a visitarlo «escuchen y comprendan de primera mano el significado» del mismo.

También han subrayado la importancia de que entre las nuevas generaciones autóctonas «no se pierda el hilo de la memoria». «Por otra parte, el pueblo de Gernika es la voz que le falta al cuadro», han añadido.

«Revolucionar la identidad vasca»

De acuerdo con los portavoces de Gernika Memoriaren Lekuko, el objetivo no es sólo traer una cuadro a un museo, es algo «mucho más profundo y mayor».

Con la llegada del ‘Guernica’ a Gernika, la plataforma pretende «revolucionar la identidad vasca, renovar y difundir su cultura, y construir la memoria colectiva con bases progresistas».

Igualmente, ven necesario el traslado del cuadro del artista malagueño a la localidad para seguir defendiendo «a los pueblos y los derechos humanos». «Es imprescindible para luchar contra el fascismo y la opresión y extender un nuevo espíritu de liberación de Gernika-Lumo a Euskal Herria y de Euskal Herria a mundo», han agregado.

Como homenaje a la aportación intelectual, humanista y literaria de Alfono Sastre, fallecido este viernes, han querido que el último mensaje de la plataforma sea una frase del dramaturgo: «El arte es una representación reveladora de la realidad».