Mikel Insausti
Crítico cinematográfico

Niños jugando con pelotas de goma

ÉRASE UNA VEZ EN EUSKADI EH. 2021. 100’ Dtor. y guion: Manu Gómez. Prod.: Beatriz Bodegas/ La Canica Films. Int.: A. Flores, A. Calderón, H. García, M. Rivera, M. Álvarez, L. Callejo, Y. González, J. Bengoetxea, M. Rubio, R. Diaz, A. Piper, M. Isasi, M. A. Rosso, V. Romero, P. Gómez, V. Vergara.

Los niños Aitor Calderón, Hugo García, Asier Flores y Miguel Rivera. (NAIZ)
Los niños Aitor Calderón, Hugo García, Asier Flores y Miguel Rivera. (NAIZ)

La ópera prima de Manu Gómez se presentó en Donostia dentro de la Gala de RTVE y, por las declaraciones que el debutante hizo entonces, ha querido enclavar esta película dentro del auge que está viviendo en la ficción la temática relacionada con el reciente pasado histórico de Euskal Herria, como si ya se pudiera hablar de cuestiones que permanecían en compás de espera hasta llegar a una coyuntura política y social más favorable. De cualquier modo, ‘Érase una vez en Euskadi’ (2021) es una obra autobiográfica, lo que quiere decir que es fruto de los recuerdos personales de infancia del propio Manu Gómez, por lo que hay que verlo como algo subjetivo que no pretende ser un reflejo histórico exacto de lo que en realidad fueron los llamados años de plomo.

La película transcurre en el verano de 1985, durante las vacaciones escolares de los cuatro niños protagonistas que tienen doce años de edad. Como quiera que Manu Gómez nació y se crió en Arrasate, es lógico pensar que se ambienta en una localidad del interior de características similares. Lo que quiere reflejar, a fin de cuentas, es lo que se cocía en las casas de las familias de inmigrantes, motivo por el que al principio del proyecto se manejó la posibilidad de utilizar en el título el término peyorativo ‘maquetos’. La difícil o más costosa integración de las personas adultas, y no solo por las diferencias idiomáticas, siempre es vista desde una mirada inocente, con unos niños que juegan con las pelotas de goma lanzadas por la policía en las manifestaciones con total naturalidad.

El cuarteto principal compuesto por los menores Asier Flores, Aitor Calderón, Hugo García y Miguel Rivera pretende precisamente ser natural y espontáneo de acuerdo con el tono costumbrista de la narración. Para ello cuentan con el respaldo de un importante reparto coral de solvencia profesional.