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Nafarroa realizará un estudio de seroprevalencia con cerca de 2.000 personas

La consejera de Salud de Nafarroa ha anunciado la realización de un nuevo estudio de seroprevalencia para medir el nivel de inmunidad de la población ante el covid-19. Participarán cerca de 2.000 personas.

La consejera Santos Induráin ha anunciado este viernes el estudio de seroprevalencia.
La consejera Santos Induráin ha anunciado este viernes el estudio de seroprevalencia. (EP)

La consejera de Salud, Santos Indurain, ha anunciado este viernes que Nafarroa va a realizar un estudio de seroprevalencia con alrededor de 2.000 personas para conocer el grado de inmunidad adquirido por la población durante la pandemia, que ha entrado en un nivel de riesgo medio con tendencia descendente.

En una rueda de prensa, la directora gerente del Instituto de Salud Pública y Laboral, Marian Nuin, ha precisado que el estudio de seroprevalencia permitirá saber qué personas están inmunizadas por haber pasado el covid y cuántas por la vacuna.

Tras recordar que este viernes se levantan las cuarentenas para los contactos estrechos, ha señalado que este mismo mes de marzo, una vez autorizado por el Comité Ético de Investigación Clínica, comenzará el trabajo de campo para seleccionar a las alrededor de 2.000 personas que tomarán parte en el mismo, entre las que pueden participar quienes por actividad ordinaria acudan a una extracción de sangre.

Con este informe se pretende esbozar la estrategia futura de vigilancia epidemiológica de infecciones respiratorias agudas en la comunidad y en el ámbito hospitalario causadas por diversas patologías, entre las que se incluye el covid-19.

En este sentido, la consejera ha puesto en valor la «larga trayectoria y experiencia» en la vigilancia de virus respiratorios que tiene Nafarroa, con una «consolidada» red centinela de gripe; y ha señalado que se trabaja ya en un escenario de transición del actual modelo de vigilancia universal, basado en un testeo sistemático entre la población general, del que se derivan medidas como aislamientos o cuarentenas, a otro modelo más selectivo con criterios clínicos y con indicación de diagnóstico y seguimiento de personas y entornos vulnerables, como mayores de 65 años, embarazadas, inmunodeprimidos, sanitarios, sociosanitarios o penitenciarios.

Según ha explicado, los niveles de riesgo y un acuerdo entre las comunidades autonómicas y el Ministerio español de Sanidad marcarán el momento para pasar a este nuevo escenario que se inspira más en modelos como el de vigilancia de la gripe y otras infecciones respiratorias agudas, que usan muestreos aleatorios de población.

Hasta entonces se han adelantado algunos cambios parciales de los protocolos como la supresión de las cuarentenas de los contactos estrechos de población general, que afectará sobre todo al ámbito escolar, donde ya no habrá más confinamientos, algo defendido por Nafarroa.

Este es el único cambio concreto que entra en vigor este viernes, al margen de otras cuestiones administrativas como el hecho de que esta semana la Unión Europea haya equiparado las pruebas de antígenos hechas por personal sanitario a las PCR para la obtención del certificado de recuperación.

Indurain ha destacado que Nafarroa llega a esta nueva etapa con «una buena situación de salida» para adaptar el sistema y los protocolos a lo aprendido durante las sucesivas olas de la pandemia y establecer un modelo para el futuro.

Estudio de seroprevalencia anterior

La Comunidad Foral ya participó en su día en un estudio de seroprevalencia realizado por el Ministerio con cuatro rondas, ha recordado Nuin.

Y ha indicado que en la última, en noviembre de 2020, con una participación de 1.422 personas, se concluyó que un 10,8% de la población navarra tenía anticuerpos IgG frente al covid-19 (5,8%, 6,4% y 6,7% en la primera, segunda y tercera ronda, respectivamente), y hasta un 14,4% si se tenían en cuenta las cuatro rondas.

Ahora se sabe que un 30% al menos de la población navarra ha pasado la infección y el estudio podrá indicar cuántas personas más han tenido la enfermedad de forma asintomática y la persistencia de la inmunidad en las vacunadas cuando el 92% de las personas mayores de 12 años tiene la pauta completa y un 55% de quienes tienen entre 5 y 11 años han recibido al menos una dosis.