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Gregg Popovich debe decidir si se jubila o no tras la eliminación de los Spurs del play-in

Las jóvenes estrellas de los Pelicans de Nueva Orleans no han dejado a San Antonio dar la sorpresa y se han impuesto poe 113-103. En el play-in del Este, los Atlanta Hawks han sacado de la pista a los Charlotte Hornets, a los que han barrido por 132-103.

Gregg Popovich, en el partido de los Spurs ante los New Orleans Pelicans.
Gregg Popovich, en el partido de los Spurs ante los New Orleans Pelicans. (Sean GARDNER / AFP PHOTO)

–Coach ‘Pop’. ¿Ha sido este su último partido al frente de los Spurs?

–Esa pregunta no procede ahora. Definitivamente, es una pregunta muy inapropiada.

Después de caer frente a los Pelicans de Nueva Orleans por 113-103, se acabó la temporada para los San Antonio Spurs. Y con ello, vuelve a ponerse en el aire el futuro de Gregg Popovich al frente del banquillo texano. «Coach Pop» tiene ya 73 años y los Spurs, más temprano que tarde, deberán introducir algún cambio en su cuerpo técnico.

El entrenador-jefe de la franquicia de San Antonio sigue dando largas y todavía parece que va a tardar en decidirse el futuro de Popovich, un nombre sin duda ligado a la edad de oro de los Spurs, pero que está viendo cómo el equipo de trabajo con el cual él alcanzó la gloria ha ido variando de nombres o algunos de ellos han cambiado de puesto.

Conociendo la idiosincrasia de los Spurs, lo más seguro es que sea un anuncio bastante discreto. Cuando Tim Duncan se unió al cuerpo técnico de Popovich durante un año, el anuncio llegó a través de un simple comunicado de prensa.

Pase lo que pase, bastante han hecho los muchachos de «Coach Pop» esta campaña 2021/22 alcanzando los play-in del Oeste, desbancando a los Lakers y llevándose la décima plaza de la Fase Regular en su Conferencia.

En lo que se refiere al partido, CJ McCollum, con 32 puntos, 6 rebotes y 7 asistencias, Brandon Ingram, con 27 puntos, 5 rebotes y 5 asistencias, y Jonas Valanciunas –22 puntos y 14 rebotes para el lituano– han supuesto demasiada dinamita para unos Spurs que se han quedado sin tiempo para imaginar una remontada a la desesperada.

Y eso que no ha estado lejos el momento de épica de los texanos. Los Pelicans ganaban de 21 puntos a falta de 10 minutos, pero han tenido que sudar hasta el final frente a unos Spurs que llegaron a ponerse a solo seis puntos.

Tras una complicada temporada en la que su estrella, Zion Williamson, no ha jugado nada por lesión, los Pelicans han llegado al final del curso con buenas sensaciones. Han mejorado con la llegada de McCollum y ya solo tienen a Los Angeles Clippers como último obstáculo para alcanzar los play-offs. Pero claro, hay que tener en cuenta que el duelos e disputará en la sede angelina, al tiempo que también merece mención que colarse en la postemporada supone vérselas con los Phoenix Suns, el mejor equipo de la NBA en la Liga Regular.

Yendo de menos a más, la franquicia de Nueva Orleans ha ido agrandando su ventaja, empezando por el ritmo que le ha puesto su base reserva José Alvarado. De su mano, los Pelicans han pasado de un 45-43 muy ajustado a un 61-50 al descanso más desahogado.

El regreso de los vestuarios ha sido demoledor para los Spurs, que han visto cómo su rival se ha escapado hasta un maximo de 21 puntos de renta, con el partido descontando los minutos finales. A la desesperada, los pupilos de Gregg Popovich han empezado a notar todo tipo de tiros, en especial Devin Vassell, Dejounte Murray y Jakob Poeltl, y a los Pelicans, que no deja de ser una franquicia joven e inexperta en estas lides, les ha entrado el vértigo.

El duelo se ha puesto 97-91, con los Spurs soñando con una gran remontada, pero ha emergido entonces Brandon Ingram para, sumando ocho puntos en los cinco minutos finales, romper el encantamiento de San Antonio y obligar a Gregg Popovich a pensar en su futuro y no el siguiente partido.

Inesperada desigualdad

Los Atlanta Hawks, con 24 puntos y diez asistencias de Trae Young, han aplast ado por 132-103 a los Charlotte Hornets y se citarán con los Cleveland Cavaliers el próximo miércoles en la segunda y última ronda del play-in, en la que se jugarán el billete para los play-offs y el derecho a medirse con los Miami Heat.

En un cruce entre equipos que en la Fase Regular han acabado con el mismo balance, 43-39, en el momento decisivo ha pesado más el fondo de armario de los Hawks, en los que hasta seis jugadores han acabado por encima de los trece puntos.

Además de los 24 puntos de Young, DeAndre Hunter ha añadido 22 puntos, Danilo Gallinari 18, Clint Capela 15 y Kevin Huerter y el serbio Bogdan Bogdanovic, 13 puntos cada uno.

Los Hornets han cerrado su temporada con un partido que no ha estado a la altura de su rendimiento en las últimas semanas, cuando habían ganado siete de nueve partidos.

LaMelo Ball ha firmado 26 puntos, siete rebotes y cinco asistencias, pero su equipo no ha logrado competir en ningún momento con el hambre ganador de Atlanta, que también ha dispuesto del apoyo de su público.

En un comienzo lento para ambas estrellas, Ball en los Hornets y Young en los Hawks, ha sido Kevin Huerter en liderar a los de Atlanta con diez tempraneros puntos, y tres de tres en triples, que llegaron a darle a su equipo trece puntos de ventaja en el 29-16 del primer cuarto.

Montrezl Harrell, con todo, ha podido contener el ímpetu de los locales y PJ Johnson, con un tres de cuatro en triples, ha permitido a los Hornets mantenerse a ocho puntos de distancia: 60-52 al descanso.

Apoyados por su público, los de Georgia no han tenido dudas en ir a por el partido, sin dar oportunidad alguna a los Hornets. DeAndre Hunter ha conectado 16 puntos en el tercer período y Young y Bogdanovic, con un tremendo triple, han aumentado el margen hasta el 93-67, sentenciando el partido. el rewto del choque ha quedado a beneficio de inventario.

Los Hawks se han salido en el primer examen de este play-in, pero necesitarán un nuevo triunfo, esta vez a domicilio contra los Cavs, para ganarse el derecho a retar a los Miami Heat, reyes de la Conferencia Este.