El Museo Diocesano de Donostia (D’Museoa) ha admitido este viernes que, al contrario de que lo aseguró el pasado 1 de julio, ningún técnico del museo Bellas Artes de Bilbo conocía las obras atribuidas a Jorge Oteiza expuestas por este centro de arte de la capital guipuzcoana.

Quince días después de asegurar que tanto la Fundación Jorge Oteiza como el Museo de Bellas Artes de Bilbo «tuvieron pleno conocimiento en su momento de la existencia de algunas de las obras», el Museo Diocesano se desdice y matiza ahora, en una breve nota, que ningún técnico ni la dirección de la pinacoteca bilbaína «han tenido en ningún momento pleno conocimiento de ninguna de las obras motivo de la actual controversia».

La polémica surgió a finales de junio, cuando el Museo Diocesano exhibió 16 esculturas bajo el título ‘Oteiza Argentinan’ y la Fundación Jorge Oteiza aseguró que existían «datos suficientes» para concluir que dichas obras eran falsas.

D’Museoa afirmó haber hecho «todas las verificaciones, estudios, comprobaciones y diligencias debidas antes de programar y diseñar la exposición» y que, «en ningún caso, habría permitido la exhibición de una sola obra sobre la que existiera la mas mínima sospecha en cuanto a su autoría».

Además, añadió que tanto la Fundación Jorge Oteiza como el Museo Bellas Artes de Bilbao conocían algunas de estas obras, aunque ahora admite que, en el caso del centro bilbaíno, no era así.