Con el 0-3 de este domingo ante el Villarreal, Osasuna es el cuarto equipo de Primera División que menos goles ha convertido en las 26 jornadas de liga, acumulando actualmente 276 minutos sin marcar un gol.

Con las semifinales de Copa a la vuelta de la esquina, las sensaciones no son las mejores. A la falta de fútbol y aquella esencia que tanto dio a los rojillos hace unos meses, se une una clara sequía de cara a puerta que no ha permitido al equipo alcanzar los números marcados para este 2023.

A diferencia de la última salida en Mestalla, Osasuna estuvo cerca de romper la mala racha. Los palos de Abde y Darko impidieron al equipo quitarse esa coraza que estorba desde hace varias jornadas.

Osasuna venció al Sevilla en el Sánchez-Pizjuán el pasado 26 de febrero con el postrero gol de Abde en el minuto 84. Fue el último tanto de los navarros en liga. El posterior empate a cero en casa ante el Celta y la derrota frente al Valencia por 1-0 empañaron el éxito de la ida de Copa contra el Athletic (1-0).

Si echamos la vista atrás, el grupo de jugadores que dirige Jagoba Arrasate tan solo registra 4 goles en 8 jornadas, cifras que no dan opción a grandes metas.

La inercia ha menguado y el equipo es noveno con 34 unidades, empatado a puntos con el Celta, y por encima del Mallorca (32) y el Girona (31).

Tan solo el Elche, último con 19 goles; el Valladolid, 16º con 20 y el Cádiz, 15º con 21, han marcado menos goles que los de Tajonar. Los rojillos, con 22, empatan en este apartado con el Mallorca, su próximo rival tras el parón por selecciones.

El máximo goleador de Osasuna es, con diferencia respecto al resto, Chimy Ávila. El argentino, habitual en banda derecha, lleva 7 dianas. No marca desde el 22 de enero frente al Elche y el de Rosario buscará igualar su mejor registro (9 goles) en Iruñea en el tramo final. Es el jugador que más ha rematado, con 22 finalizaciones.