Iker Bizkarguenaga
Aktualitateko erredaktorea / Redactor de actualidad

Trump anuncia «algo inédito» horas antes de reunirse con Netantahyu

Trump disparó ayer las expectativas sobre la propuesta estadounidense para un acuerdo en torno a Gaza al anunciar algo «especial» e «inédito». El carácter voluble del mandatario y los precedentes obligan a extremar la cautela, pero todos los focos van a estar pendientes de su reunión con Netanyahu.

Benjamin Netanyahu entrega a Donald Trump un sobre en la última reunión entre ambos mandatarios.
Benjamin Netanyahu entrega a Donald Trump un sobre en la última reunión entre ambos mandatarios. (Andrew CABALLERO-REYNOLDS | AFP)

Donald Trump dijo ayer que hay «algo especial» en marcha relacionado con Oriente Próximo. «Tenemos una oportunidad real de grandeza en Oriente Próximo. Todos están dentro para algo especial, algo inédito. ¡¡¡Vamos a conseguirlo!!!», publicó en su estilo particular el presidente de EEUU en la red Truth Social, de su propiedad. No hubo mayor concreción, y viendo los precedentes, toca tirar de cautela ante este tipo de anuncios.

Trump se refería, en todo caso, a su última propuesta respecto a Gaza, después de que la semana pasada asegurara que antes de cerrar el plan tenía que reunirse primero con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, un encuentro que está previsto que se celebre hoy en la Casa Blanca. El mensaje podría apuntar a un visto bueno de Israel a la iniciativa estadounidense, después del rechazo previo del Gobierno israelí a anteriores propuestas de los países mediadores, EEUU, Egipto y Qatar.

De momento, Netanyahu confirmó ayer que están trabajando en torno a ese documento. «Estamos trabajando en ello. Aún no está finalizado, pero estamos trabajando con el equipo del presidente Trump, de hecho, en estos momentos. Y espero que podamos llevarlo a cabo», declaró el líder sionista en una entrevista con la cadena Fox News.

HAMAS NO TIENE LA PROPUESTA

«Queremos liberar a nuestros rehenes. Queremos acabar con el dominio de Hamas y desarmarlos, desmilitarizar Gaza en el nuevo futuro que se está preparando tanto para Gaza como para los israelíes y para toda la región», añadió el mandatario de Israel. Precisamente, Hamas, uno de los actores concernidos por el contenido de la iniciativa, dijo que no ha recibido nuevas propuestas de los mediadores tras la suspensión de las negociaciones para una posible tregua en Gaza tras el ataque israelí contra sus líderes a principios de este mes en Qatar, aunque indicó, en un comunicado, que está dispuesto a considerar cualquier propuesta «de manera positiva y responsable».

Trump no ha dado detalles del plan de manera oficial, aunque estos han sido difundidos este fin de semana, y aunque aseguró el pasado viernes que el acuerdo entre Israel y Hamas está «muy cerca», el comunicado del grupo palestino parece desmentirlo.

«Será un pacto que traerá de vuelta a los rehenes y pondrá fin a la guerra», afirmó el presidente de EEUU el mismo día en que Netanyahu declaraba ante la Asamblea General de la ONU que el reconocimiento del Estado palestino constituye una «recompensa» al antisemitismo y advertía de que Israel iba a «acabar el trabajo en Gaza». Estas palabras chocan con lo expresado por su principal socio en el tablero internacional, donde cada vez está más aislado, y está por ver qué sale del encuentro de hoy, el quinto que ambos mantendrán solo en lo que va de año.

PENDIENTES DE NETANYAHU

Los focos, por tanto, van a estar fijos en la Casa Blanca, pues de lo que salga de ahí pueden depender el futuro inmediato de una Gaza arrasada y del conjunto de Palestina. Y una de las mayores incógnitas es la que representa Netanyahu, que se mostró arrogante y desafiante ante la ONU, pero cuya figura genera una creciente repulsa internacional y que tiene un difícil panorama judicial casa.

Fuentes conocedoras de lo que se está labrando han señalado a este periódico que todo dependerá de hasta qué punto Trump es capaz, o quiere, obligar a Netanyahu a mover ficha y de si Washington está dispuesto a aceptar los apuntes que los estados árabes ya han hecho a su propuesta. También de la medida en que el primer ministro israelí considere que puede vender como una victoria algunos de los apartados que se mencionan.

Estas fuentes destacan que Netanyahu es consciente de que aceptar la nueva propuesta de Trump provocaría probablemente que miembros de su coalición de Gobierno se hicieran a un lado, lo que a su vez solo dejaría dos opciones: convocar elecciones anticipadas o incorporar nuevos miembros.

En este sentido, hay que recordar que su coalición ya es endeble, con los ultraortodoxos apoyándola desde fuera, y que ningún cambio que acometa va a aportar estabilidad. Asimismo, no hay motivos para pensar que Netanyahu quiera elecciones anticipadas o conformar una nueva coalición. Al contrario, el líder sionista podría tener en mente que necesita varios meses más para crear las condiciones necesarias tanto para poner fin con éxito a su juicio, logrando que se retiren o se archiven los cargos, como para maximizar las condiciones para su reelección. Hasta entonces, indican a NAIZ estas fuentes, hará lo posible por mantenerse en el poder y su actual coalición con Ben Gvir y Smotrich sería la que mejor sirve a este interés.

En esta tesitura, un acuerdo como el que se plantea, aun estando escorado hacia los intereses israelíes, no le convendría. Por tanto, habría que contar con que Netanyahu no está dispuesto a suscribirlo. Otra cosa sería que Trump se lo impusiera, pero de ser así, y está por ver, el proceso requeriría largas semanas de toma y daca, en las que además la parte israelí puede jugar todo tipo de bazas (dilaciones, sabotajes, acuerdos paralelos) para hacer descarrilar las negociaciones.

De ser así, quienes desde Palestina se han puesto en contacto con este diario consideran que los interlocutores árabes de Trump -a ser posible con países europeos y de otros lugares del mundo- deberían armar una estrategia para evitar que Israel tenga éxito a la hora de culpar a otros y para dar cauce a la frustración del mandatario estadounidense con su homólogo israelí.

Todavía quedan, sin embargo, bastantes etapas para llegar a ese estadio, mientras que en Gaza son ya más de 66.000 las víctimas oficiales -se estiman en decenas de miles las desaparecidas bajo los escombros- de la masacre israelí.

El ministerio gazatí de Sanidad registró 79 fallecidos en las últimas 24 horas, incluyendo cadáveres recogidos entre escombros que pudieron haber muerto con anterioridad. Entre ellos hay 6 personas fallecidas cuando intentaban obtener ayuda humanitaria, y ya son al menos 2.566 los palestinos que han perdido la vida y 18.769 los heridos en este tipo de incidentes, condenados por la comunidad internacional.

Además, a lo largo del sábado llegaron a los hospitales de toda Gaza 379 heridos, situando el total de atendidos desde octubre de 2023 en 168.162.