Cinco monjas de entre 87 y 101 años, que la Iglesia católica considera la «verdadera comunidad religiosa» del monasterio burgalés de Belorado después de la excomunión de otras ocho, han sido trasladadas desde el convento de Urduña, donde se encontraban en condiciones insalubres, al hospital de Basurto de Bilbo, para ser sometidas la revisión médica.

Según ha informado a Europa Press la Guardia Civil, agentes han realizado labores de apoyo a la comitiva judicial que este jueves a la mañana ha acudido al convento de Urduña, por orden del Juzgado de Instrucción número 5 de Bilbo.

Al parecer, las monjas mayores se encontraban en «condiciones higiénico-sanitarias no adecuadas para las personas vulnerables», sin control médico y, además, había «muchas reticencias para que sus familiares pudieran visitarlas».

La magistrada del Juzgado de Instrucción número 5 de Bilbo ha pedido apoyo de la Guardia Civil, como policía judicial, para trasladar a las religiosas al centro hospitalario para su revisión médica.

La jueza, acompañada de la fiscal, se ha trasladado al convento de Urduña, acompañadas por los agentes, y al comprobar la situación en la que se encontraban las monjas, ha dado la orden de que fueran evacuadas a Basurto, donde alguna podría quedarse ingresada.