Isidoro Berdié Bueno
Profesor de Ciencias de la Educación, doctor en Historia y Filología Inglesa

Capitalismo y comunismo en su fase final

Esta lucha que ha habido entre izquierda y derecha ha sido un engaño para todos, en beneficio de una minoría que, con colores distintos, ambos eran igual de nefastos y onerosos.

Mientras se cumple o no el pronóstico de Marx que el capitalismo caería fruto de sus propias contradicciones, estamos viendo qué el último estadio de ese capitalismo es el Estado totalitario mundial, con lo cual entre comunismo y capitalismo no era tal la diferencia qué durante la guerra fría se nos vendió, sino que mas bien eran hermanos con un mismo objetivo y la misma herramienta el sometimiento de todos los pueblos y naciones, que serían tratados como siervos y vasallos sin derechos.

Esto estaba en la esencia de ambos sistemas capitalismo y comunismo, el desprecio del ser humano, la dignidad, el amor, la libertad sobraban. La elite del capitalismo mundial globalista quiere imponer el marxismo a todos, como el mejor medio de dominio de masas, de hecho muchos ya no quieren la luz sino seguir al guía (führer). El triunfo de la mascarilla ha sido el mejor entrenamiento para la obediencia y sometimiento.

Para Bill Gates y adláteres millonarios la humanidad es una baja casta de la que se puede abusar impunemente, y el poder sigue queriendo que nos creamos el cuento de Wuhan, el mayor reto que ha tenido la humanidad para su libertad.

El comunismo es el sacrificio por el Partido hasta la muerte, y el capitalismo el hastío del hedonismo por el abuso de mercancías y bienes. El uno acaba en el gulag y el otro en el prozac, ambos en la decepción mas absoluta, frustración y esclavitud, los dos enemigos de la humanidad, dos caminos que conducen ambos al pozo de la autodestrucción.

No son futuro para nadie, nos llevarán a malos sitios, entre ellos a una vida indigna de ser vivida, es uno de los efectos negativos de ese pozo y eso es lo que hay que evitar. La libertad ha de ser nuestra compañera de camino para no ir de rebaño al matadero.

Esta lucha que ha habido entre izquierda y derecha ha sido un engaño para todos, en beneficio de una minoría que, con colores distintos, ambos eran igual de nefastos y onerosos, utilizando relatos falsos para enfrentar a los iguales, hacerles supuestos enemigos que se mataban en guerras sin conocerse, defendiendo una bandera, una palabra o un Partido que en realidad eran un señuelo como ataca al capote el toro.

Porque la corrida de toros es una guerra, en la que un engaño (el capote) acaba en sangre, da igual qué sea la del toro o la del torero, las guerras son así, como una corrida de toros, en que dos masas humanas se les ha obligado a enfrentarse.

Estas dos ideologías principales (capitalismo y comunismo) tienen unas subideologías qué disputan la primacía entre ellas y quiere la mayor parte del expolio que hacen a la humanidad, viven de nuestra sangre y son unos vampiros. Tienen ausencia de autocrítica y piensan que fuera de su ideología no hay salvación, cuando todas las ideologías son provisionales, cambian a medida que evoluciona la sociedad.

Pero hoy los partidos políticos son como una foto fija de una sociedad qué ya no existe ni sus recetas son válidas para el presente, siendo el mayor obstáculo para el progreso. Todos tienen un programa rígido que no es intercambiable entre ellos, no pueden ser aliados, tratan de absorber el uno al otro y si no es posible los destruyen.

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