Discursos
Prestar atención a la mayoría de los cabezas de listas en el Congreso de los Diputados en la capital del Estado, es una práctica de masoquismo intelectual por las arengas cuarteleras de sus soflamas que sólo convencen a los que están previamente convencidos. Atender a los dos partidos mayoritarios es un ejercicio inútil porque sus resultados saltan a la vista y sus secuelas son manifiestas.
El único interés estriba en seguir los discursos de los partidos que se autoproclaman como el futuro de una nueva política. Ciudadanos, no merece ni una nota a pie de página, es todo un engaño tan desnudo como su número uno. El autoproclamado salvador del Estado, que se abraza a las brigadas internacionales de la guerra entre españoles, dice sentir un inmenso orgullo hacia ellos, se puede adivinar que algo de modestia no le vendría nada mal. Toda su retórica dentro de muy poco tiempo se pondrá a prueba, porque toda su osadía política estriba en formar un Estado plurinacional.
El proceso iniciado en Catalunya no es un encaje de bolillos, no engañe como hacen los otros, muchos catalanes quieren un Estado, sin ninguna coletilla tramposa. Sus afines en el Principado les quedan poco tiempo para seguir divagando en la niebla inútil. O se suman al proceso, o son como los demás.
Atentamente.