Marta Pérez Arellano

Por un 2019 sin casualidades

Una mujer es torturada y asesinada a manos de su vecino en un pueblecito de Huelva. En Almería, la actuación de cuatro hombres evita que una mujer sufra una violación en las proximidades de una carretera.

En ambos casos, los protagonistas de la noticia eran gitanos. En el primero, el dato ha circulado por cielo y tierra. En el segundo, la mayoría de medios no ha hecho eco de este detalle.

¿Casualidad…?

En las mismas fechas en que se celebraba el juicio por violación múltiple a una mujer en los sanfermines del 2016, saltó a la luz pública el caso de las violaciones, abusos y explotación reiterados a decenas de temporeras de la fresa en Huelva por parte de sus empleadores, vecinos payos de la zona.

Mientras se celebraban numerosas y concurridas manifestaciones de repulsa en contra de la resolución del caso de sanfermines, escasas fueron las acciones de apoyo a las jornaleras. Así mismo, la cobertura mediática que se dio a uno y a otro estuvo a años luz.

La mujer del caso de sanfermines era blanca y de nacionalidad española. Las jornaleras, marroquíes.

¿Casualidad…?

Tras el asesinato de una mujer en Huelva, masivas manifestaciones vecinales exigían que los familiares del presunto culpable se marchasen del pueblo. En el caso de las temporeras de la fresa, la causa ha quedado archivada y las expresiones de repulsa vecinal han sido mínimas.

¿Casualidad…?

Un año más, en la mayoría de las noticias relacionadas con violencia de género, cuando una mujer migrante es agredida por su pareja española, el dato de la nacionalidad de ella se destaca. Cuando él es extranjero y ella local, la nacionalidad de él también se destaca.

¿Casualidad…?

El machismo y el racismo son hilos que se entretejen en una compleja maraña de privilegios y opresiones que generan violencias. Mientras no los reconozcamos y les otorguemos igual valor, analizando la realidad y a nosotras mismas desde una mirada crítica, estaremos contribuyendo a estas violencias.

Luchando activamente para que en el 2019 no ocurran estas «casualidades» –bien sea en nuestro círculo de amistades, en el trabajo o en cualquier iniciativa en la que participemos– construiremos una sociedad más justa y habitable para todos y todas.

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