Romper el tope del 0,25% de subida en las Pensiones. Recuperar el poder adquisitivo perdido. Establecer la pensión mínima en 1.080 euros. Fortalecer los Servicios Sociales.

Este es el destino que a nuestro entender debe tener una parte del superávit de la recaudación obtenida por las Diputaciones en la CAVP y Nafarroa, cuyo aumento reconocido por las mismas es del 12% de media.

No hay excusa. Las personas pensionistas venimos sufriendo una pérdida del poder adquisitivo del 6,5% desde que en 2011 prácticamente se nos congelaran las pensiones. También hemos sufrido una pérdida del 13,50% en los complementos de la RGI para las pensiones más bajas.

Para el futuro, la perspectiva es que seguiremos perdiendo poder adquisitivo al menos hasta el año 2022, puesto que la subida anual de la pensión será de un 0,25% según lo establecido por el Gobierno de Rajoy.

Por otra parte, las reformas de las pensiones hechas desde 2011, reducirán el valor del cálculo de la Base Reguladora en al menos el 19%, al pasar de 15 a 25 los años de cotización necesarios para tener derecho a una pensión.

Los Servicios Sociales de atención a la Dependencia se están privatizando y su calidad se está reduciendo como consecuencia de ello.

Las últimas movilizaciones que se están realizando estos últimos lunes en los ayuntamientos señalan un estado de malestar generalizado entre las personas pensionistas. El deseo de tener una vida digna ganada tras muchos años de cotizaciones y trabajo no puede ser ignorado de nuevo.

Desde las Plataformas de Pensionistas de Hego Euskal Herria, reclamamos la recuperación del IPC como referencia del cálculo de revalorización anual de las pensiones, derogar el 0,25% de crecimiento impuesto por el Gobierno de Rajoy y el establecimiento de unas pensiones mínimas de 1.080 euros, que es la recomendación de la Carta Social Europea como ingreso mínimo de dignidad. Para que esto sea viable y garantice el futuro de las pensiones necesitamos un Sistema Propio de protección y Seguridad Social.

Esto es lo que reclamamos, esto es lo que defenderemos en la calle y es lo que exigimos a los Gobiernos de Madrid, Gasteiz e Iruñea.