Sobre la AGI de la Diputación de Gipuzkoa
Sr. director:
Leía ayer (miércoles) que EH Bildu de Gipuzkoa ha criticado que esa Diputación haya hecho un estudio entre técnicos de diferentes municipios para evaluar la AGI (una ayuda económica complementaria de la RGI – de entre 600 y 900 euros- para quienes lleven menos de tres años de empadronamiento).
Critica Bildu ese estudio de evaluación y algunas preguntas del cuestionario, tales como: «¿Cree que la AGI sirve para mejorar la situación de las personas residentes en Gipuzkoa que se encuentran en situación de pobreza o cree que únicamente está atendiendo a personas nuevas que van llegando a Gipuzkoa? ¿Cree que la AGI tiene un efecto llamada? ¿Cree que las personas solicitantes de la ayuda han llegado a Gipuzkoa porque existe la AGI? ¿Cree que si se suprime la AGI (…) simplemente se reducirán los flujos sin repercutir negativamente en las personas residentes en Gipuzkoa?»
Me parece adecuado que las instituciones evalúen técnicamente el uso que se da a esa importante partida de su presupuesto, teniendo en cuenta las importantes necesidades sociales de todo tipo: jóvenes que tiene que vivir de sus familias o emigrar, jubilados y viudas con pensiones totalmente insuficientes, personas dependientes o con minusvalías que reciben muy escasas ayudas, parados que viven gracias a sus mayores, personas totalmente dependientes del sueldo de su pareja, etc.
Muchos (ni xenófobos ni del PP) pensamos que lo prioritario es ayudar a esos grupos originarios del territorio y además sí nos preocupa, por diferentes y problemáticas razones, el indudable «efecto llamada» que se genera.
Por todo ello, me parece equivocada y simplona esa crítica al estudio de la Diputación y que lo califique como «xenófobo» y «de estrategia marotista». Se muestra así totalmente alejado de la opinión de muchos ciudadanos, incluida gente próxima a sus otros planteamientos políticos.
Atentamente