El agente, de 53 años, embistió a dos coches estacionados –que resultaron dañados– y en las pruebas de alcoholemia que le practicó la Policía Municipal arrojó sendos resultados positivos de 0,71 y 0,85 miligramos de alcohol por litro de aire espirado, cuando el máximo legal es de 0,25.
La Policía de Gasteiz ha tramitado las correspondientes diligencias al Juzgado de Guardia y le ha imputado un delito contra la seguridad vial por conducir bajo la influencia de bebidas alcohólicas.
Varios medios han informado de que el agente es un mando intermedio de la Ertzaintza y que conducía un vehículo oficial sin distintivos.
Desde el Departamento de Seguridad de Lakua han indicado que si se confirma lo sucedido se abrirá el correspondiente expediente disciplinario.