Para ello ha abierto hasta el próximo 22 de marzo un periodo de consulta pública en el portal del Gobierno Abierto de Nafarroa para recabar la opinión tanto de la ciudadanía como de las organizaciones más representativas de este sector. A esto hay que sumar las reuniones ya mantenidas con la Federación Taurina de Nafarroa como con la Policía Foral, el Departamento de Salud y los servicios de Protección Civil y Ganadería.

Con este nuevo Reglamento, el Departamento de Presidencia, Función Pública, Interior y Justicia pretende dotar a los eventos taurinos de una regulación más acorde a la realidad actual, y que esté especialmente orientada a la protección de la vida, la integridad física y la seguridad, dado el riesgo que revisten estos eventos, según señala el Ejecutivo en un nota.

Por otra parte, las incidencias ocurridas en los últimos años en los espectáculos taurinos populares, con el fallecimiento de algunas personas, aconsejan realizar una regulación más precisa de estas actividades, que atienda fundamentalmente a las características de los recorridos y los espacios habilitados para su celebración, a la propia naturaleza de las reses, a las condiciones y conductas de las personas participantes, y a los dispositivos de prevención.

Finalmente, el Departamento de Presidencia, Función Pública, Interior y Justicia también cree que es necesario revisar el sistema de atención sanitaria previsto para los eventos taurinos para lograr su adecuación a los modelos operativos actuales.

Objetivos del nuevo Reglamento
Como se ha mencionado, el primer objetivo del nuevo Reglamento Taurino será minimizar el riesgo que conllevan estos eventos tanto para las personas participantes, las espectadoras y otras ajenas a ellos, que puedan sufrir daños personales o en sus bienes. Para ello será necesario regular aspectos como la seguridad de las instalaciones y recintos, las condiciones de estancia de las y los espectadores, las condiciones de participación, la profesionalidad de las personas intervinientes en los eventos de lidia y muerte, las características de las reses y los recursos sanitarios. Además, en el caso de los espectáculos taurinos populares, la regulación general debería complementarse con la elaboración y aprobación de un plan de seguridad específico.

En segundo lugar, el nuevo Reglamento deberá recoger medidas encaminadas a preservar la sanidad y bienestar animal, ya que son eventos considerados de riesgo para las reses por el estrés al que son sometidas y por su paso por instalaciones sin limpieza y desinfección adecuadas, añade el Ejecutivo.

El tercer gran objetivo es regular los derechos específicos que tienen las personas que asisten como espectadoras a estos espectáculos, como pueden ser a que se desarrolle el festejo en su integridad y en la forma que haya sido anunciada, a la devolución de las cantidades pagadas en casos de modificación sustancial o suspensión, a ser admitidas en las mismas condiciones objetivas que cualquier otra persona, y a ser informadas de las vías de evacuación del recinto.