El presidente del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela (TSJ), Maikel Moreno, denunció que las sanciones que le impuso a él y a otros siete magistrados el Departamento del Tesoro de Estados Unidos buscan intimidar a los jueces para hacer mella en la independencia del Poder Judicial.

«El Gobierno de los Estados Unidos de Norteamérica intenta coaccionar e intimidar la conciencia de los magistrados del máximo órgano judicial de la República Bolivariana de Venezuela para así imponer una agenda al margen de las leyes y del proceso democrático en nuestro país», advirtió Moreno.

El pasado jueves, el Departamento del Tesoro de EEUU impuso sanciones económicas al presidente del TSJ y a siete magistrados de la Sala Constitucional de la corte. Washington los acusó de «usurpar la autoridad» de la Asamblea Nacional (AN, Parlamento).

La medida congela bienes dentro de la jurisdicción estadounidense y prohíbe transacciones financieras

Según el juez Moreno, «los propósitos imperiales movidos por intereses oscuros pretenden mellar la independencia del Poder Judicial para así tomar control de la Administración de Justicia». Añadió que los magistra- dos no aceptan «la imposición e intervención de Gobierno extranjero alguno» en competencias que son exclusivas del TSJ.

El anuncio de las sanciones coincidió con las declaraciones del presidente de EEUU, Donald Trump, que afirmó que lo que ocurre en Venezuela «es un problema muy, muy horrible. Y desde el punto de vista humanitario, es algo que no hemos visto en mucho tiempo».

A la vez, la alianza opositora MUD quiere hacer de la manifestación nacional convocada para hoy «la mayor demostración de fuerza» que se haya visto hasta ahora, tras mes y medio de protestas antiguberna- mentales.

46 muertos

Según cifras de la Fiscalía venezolana, ya han muerto 46 personas en el marco de estas protestas, buena parte de ellas por grupos armados. Ayer se sumaron otras dos víctimas. Un policía falleció tras ser herido en la cabeza por un francotirador el pasado lunes en la Autopista del Este de la ciudad de Valencia, donde tenía lugar una concentración opositora. También murió el joven Daniel Rodríguez, de 18 años en el estado Táchira, en un ataque también supuestamente llevado a cabo por colectivos armados.