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damasco

Cese de hostilidades y pacto para crear una «zona de distensión» en Guta Oriental

El anuncio del Ejército sirio del fin de las hostilidades en Guta Oriental, donde se creará una «zona de distensión», y el alto el fuego entre facciones islámicas en Idleb devolvió cierta calma a esos lugares.

El Ejército sirio anunció ayer el cese de hostilidades a partir del mediodía (hora local) en varias zonas en la región de Guta Oriental, el principal bastión de la oposición siria en las afueras de Damasco, coincidiendo con el anuncio de Rusia de la creación de una «zona de distensión». Según la agencia oficial de noticias SANA, la Comandancia General del Ejército y de las Fuerzas Armadas aseguró que respetarán dicho acuerdo, pero que responderán en el caso de que la otra parte incumpla el acuerdo.

Por la mañana, el Ministerio de Defensa ruso había informado de la firma de unos acuerdos entre militares rusos y representantes de la oposición moderada, con la mediación de Egipto, para crear y regular una «zona de distensión» en la región de Guta Oriental, que incluiría el establecimiento de supervisión, rutas para el suministro de ayuda humanitaria a la población y el libre desplazamiento de las personas. Se espera que en los próximos días salga el primer convoy humanitario a la zona y comience la evacuación de los heridos.

El acuerdo llegó dos días después de que al menos 28 efectivos gubernamentales sirios murieran en una emboscada del Ejército del Islam en el pueblo de Al-Rihan, al sur de la localidad de Al-Duma, la mayor de Guta Oriental y feudo de este grupo, según el opositor OSDH.

En las últimas semanas, se habían intensificado las hostilidades en Ghuta Oriental, donde las fuerzas gubernamentales tratan de progresar frente a facciones rebeldes e islámicas.

El anuncio de cese de las hostilidades en Guta Oriental llegó horas después de que las dos principales facciones islámicas en la provincia de Idleb, el Movimiento Islámico de los Libres de Sham y el Organismo de Liberación del Levante –alianza de la exfilial de Al Qaeda– acordaran un alto el fuego para poner fin a un enfrentamiento entre ambos que había derivado en combates junto a la frontera con Turquía, lo que devolvió una relativa calma a la zona. Ambos pactaron también la liberación de prisioneros y la salida de las facciones del paso fronterizo de Bab al-Haua y su entrega a una administración civil.

Coincidiendo con este alto el fuego en Idleb, el general Tony Thomas, jefe de la fuerzas especiales estadounidenses confirmó que la CIA ha puesto fin a su programa de ayuda a los rebeldes sirios que luchan contra el Gobierno de Bashar al-Assad, pero desmintió que la decisión responda a la voluntad de lograr el respaldo de Rusia para establecer un alto el fuego en el suroeste del país.

El diario “The Washington Post” había informado el miércoles que el presidente estadounidense, Donald Trump, había tomado la decisión en un intento por encontrar maneras de trabajar con Rusia en Siria.