Representantes de estos colectivos se han concentrado ante la sede del Gobierno autonómico en Bilbo tras una pancarta en la que se leía «Lanbide ampara la violencia de género», en el contexto de la conmemoración mañana del Día Internacional contra la Violencia hacia las Mujeres.
Liz Quintana, portavoz de Argitan –Centro Asesor de la Mujer (Barakaldo)–, una de las asociaciones convocantes, ha afirmado en declaraciones a los medios que el Ejecutivo de Gasteiz ha fijado unos criterios «alejados de la realidad diaria» para que estas mujeres accedan a las prestaciones.
Ha precisado que el hecho de carecer de recursos obliga a estas personas a «continuar sometidas a situaciones de violencia». Como ejemplo ha citado que Lanbide exige a las víctimas de malos tratos que su agresor tenga una orden de alejamiento en vigor, lo cual «depende de la voluntad de los jueces, no de las mujeres».
Otro ejemplo consiste en que, en el caso de que tengan hijos, también se les obliga a denunciar al padre para solicitar la pensión alimenticia, una actuación judicial que «no resulta fácil» dada la situación de vulnerabilidad de estas víctimas.
Quintana ha anunciado que remitirán un manifiesto con estas reivindicaciones a Emakunde, en el que incluirán también propuestas para mejorar la atención a este colectivo, como un protocolo de atención gestionado por los servicios sociales municipales.